¿ADÓNDE NOS LLEVA EL ROCK CHABÓN?
Informe El Bordo y Las Pastillas del Abuelo. Intentan ocupar el vacío que dejó Cromañón. La nueva generación barrial.
Por Juan Andrade Especial Para Clarín
Hay un lote disponible en el barrio del rock. Hace poco más de un año, Los Piojos y La Renga tocaron el mismo día en River y en el estadio Ciudad de La Plata: demostraron que el aumento de volumen de sus seguidores no ponía en riesgo su respectiva capacidad de convocatoria. El 30 de mayo de 2009 marcó el comienzo del anunciado “parate” de los primeros y la virtual retirada de los segundos de los escenarios, para darle forma al material de su próximo disco. También se produjo el estallido programado de Bersuit Vergarabat y su escisión en una serie de proyectos paralelos (Gustavo Cordera, Juan Subirá, De Bueyes, La Demanda).
Así centenares de miles de pibas y pibes se quedaron sin ritual. Un estado de cosas que se asemeja a lo ocurrido en el amanecer del nuevo milenio, cuando Los Redondos iniciaron su “año sabático” y Los Piojos y La Renga pegaron un salto en la liga del “rock de estadios”: de Atlanta pasaron a Huracán y, finalmente, a River. Ahora, ¿llegó el momento del recambio generacional? La etiqueta “rock barrial” o “chabón” sirvió para describir a un nuevo público, que hizo de los códigos de la esquina, la tribuna de fútbol y el aguante sus principales banderas. Pero también funcionó como un eufemismo incluso despectivo, para referirse a la creciente tribu de los “desangelados” (Indio Solari dixit ): las bandas del conurbano profundo que el bondi del menemato dejó a la intemperie. Nadie imaginaba que la fiesta de banderas y bengalas podía terminar en una tragedia como la de Callejeros en República Cromañón.
El caso de Pity Alvarez es curioso. Después de calentar la lengua stone con Viejas Locas, se dedicó a romper ciertos esquemas con Intoxicados. Sin embargo, el año pasado disolvió Intoxicados para volver con su antiguo grupo, en un movimiento de retroceso que fue celebrado por viejos y (muchos más) nuevos fans en un estadio de Vélez repleto. Con Intoxicados, emergió un pelotón de bandas dispuestas a reclamar el trono rolinga, encabezadas por Los Gardelitos, La 25, Jóvenes Pordioseros (e Hijos del Oeste, entre otros).
Las Pastillas del Abuelo y El Bordo, ambos exponentes de la clase media ilustrada de barrios como Caballito y Almagro, debutaron en el mismo lugar (La Colorada, a metros de la estación Primera Junta) y ya tuvieron su bautismo de fuego en Obras, llenaron el estadio cubierto de Argentinos Juniors y la cancha auxiliar de Ferro, también. Ahora van por más. Y no están solos en esta empresa: Las Pastillas cuentan con el apoyo de la productora Crack y El Bordo forma parte de la escudería multinacional Warner. La historia dirá cuál será su techo.
El Bordo: Los herederos 1 Mientras espera a sus compañeros en la sala de Almagro, el cantante Alejandro Kurz cuenta con orgullo que en el mismo lugar alguna vez ensayaron Los Redondos y La Renga, entre otros. El Bordo acaba de volver de una gira por la Patagonia. Hablan de pibes esperándolos en la calle con diez grados bajo cero para que les firmen un autógrafo. “Flasheaba con las banderas tipo ‘Río Grande’ o ‘Calafate’. Y les sacaba fotos”, cuenta el batero Miguel Soifer. “Parece que nuestro disco, Historias perdidas , tiene seis meses, pero recién salió en mayo. Cuando tocamos los temas nuevos se notaba que la gente los conocía: los cantaba como si fueran de discos anteriores. Antes eso tardaba un poco más en pasar”, apunta el vocalista. El crecimiento gradual que vienen experimentando también puede ilustrarse numéricamente: mientras que En la vereda de enfrente (2006) y Yacanto (2007) totalizaron unas 10 mil unidades vendidas cada uno, el reciente alcanzó la misma cifra a tan sólo dos meses de su lanzamiento.
El título del álbum alude a las heridas abiertas que dejó la última dictadura. Soifer resume la historia real en la que fue inspirada: “La madre de una amiga nuestra fue detenida con su pareja por los militares. Y a cada uno le dijeron que el otro había muerto. Ella se fue a Córdoba y él a Estados Unidos. Cada uno rehizo su vida. Y se reencontraron, de casualidad, hace cuatro años. Hoy están juntos”.
Las Historias perdidas , entonces, le dieron forma a una ópera rock criolla. “Cada canción es como una carta, en la que ellos se dicen lo que en su momento no pudieron porque estaban incomunicados”, explica Kurz, el autor. Aunque en su adolescencia los músicos iban a ver a bandas como La Renga, Los Piojos, Los Redondos y Divididos, en este caso las referencias apuntan para otro lado. La película Into the Wild , basada en hechos reales y con música de Eddie Vedder, por ejemplo. “A mí me gustan mucho los Who de Quadrophenia y Tommy . Y American Idiot de Green Day, también”, admite el cantante. “Está bueno sacar la voz de la banda, porque también sacás al oyente de su lugar. No es lo mismo que cantar: ‘Estoy parado acá, vivo en Almagro y esto es lo que creo del mundo’. Al contar una historia lo llevamos para otro lado, y eso puede ser más interesante”.
Al desmarcarse de la esquina y la inmediatez de la vida cotidiana, los encasillamientos pierden eficacia. Ya lo habían planteado en Tesoro (de En la vereda de enfrente ): “Y ese verso de si es rock barrial/ dedicáselo a otro”. “Lo que trataba de decir es que no quiero que nos etiqueten y nos dejen clavados en un lugar del que después no podamos salir”, reclama ahora Kurz. Por su parte, Soifer advierte: “Tanto Los Redondos como La Renga o Los Piojos son bandas de rock. Por ahí, el término tiene más que ver con cierto movimiento popular, con el público, que con otra cosa”.
La presentación “oficial” del disco quedará para más adelante. Todavía está fresco en su memoria el primer gran episodio de su carrera, allá por 2006. “Llegar a Obras fue como alcanzar un sueño”, dice Kurz. Después de tocar en la cancha auxiliar de Ferro y en el microestadio de Argentinos Juniors, ¿con qué sueñan? Responde el vocalista: “Sería muy lindo presentar alguna vez un disco en un estadio.” Las Pastillas del Abuelo: Los herederos 2 Aquellos pibes que egresaron del Mariano Acosta para debutar en 2002 en La Colorada seis años más tarde llenaban el microestadio de Argentinos Juniors en la presentación de su último disco, Crisis .
En el medio, claro, hubo otros pequeños grandes hitos. La balada con aires de chacarera El sensei , por ejemplo, que se convirtió en el agente de un inesperado efecto viral en Internet y sumó una cantidad exponencial de descargas cuando todavía no habían grabado su primer álbum. El concurso que los habilitó para tocar en Obras en el marco del festival de la gaseosa versión 2005, también. La creciente convocatoria en El Teatro de Colegiales y de Flores, que en este último caso marcó un record de siete fechas con entradas agotadas. O las 15 mil personas que los vieron en la cancha auxiliar de Ferro a fines del año pasado.
Los de Las Pastillas son músicos con destreza técnica que, lejos de buscar el lucimiento por la vía instrumental, ponen su talento al servicio de canciones que no se ajustan a las fórmulas. En su caso, parten del rock y en el camino se encuentran con el candombe, el reggae, el folclore o el jazz latino. Una identidad rioplatense de aguas abiertas, emparentada con los uruguayos de La Vela Puerca y No Te Va Gustar. “Si los escucha alguien de afuera, puede pensar que es world music ”, sostiene Eduardo Rocca, manager de Babasónicos y director de Crack, productora y sello que los fichó hace cuatro años. “Lo que nos interesó es que son artistas jóvenes, que están en la búsqueda”, dice.
La última convocatoria multitudinaria de Las Pastillas fue en marzo, para bailar el rock del rico Luna Park dos noches seguidas. Su primera vez en el templo del box había sido en 2008. Aquella noche, algunos fans habían ensayado un cantito: “Que abran las puertas del Monumental/ que ya nos queda chico el Luna Park”. ¿Una profecía? «
INTERNARON A CHARLY GARCÍA
El músico fue ingresado al Instituto Fleni por una reacción alérgica a los corticoides; el compositor se estaba tratando por una bronquitis que contrajo luego de su concierto en Tucumán
(Télam) - El músico Charly García fue internado en el Instituto Fleni producto de una reacción alérgica a los corticoides que estaba ingiriendo para curar una bronquitis.
Asimismo, el compositor de "Ojos de videotape" se encuentra lidiando con una lesión en una de sus piernas, que lo forzó a usar una bota ortopédica. Justamente, los corticoides sumados a los medicamentos tomados por la otra afección fueron la causa de su reacción alérgica.
Recordemos que el músico Gustavo Cerati también se encuentra en el mismo instituto, luego del accidente cerebrovascular que padeciera hace más de dos meses en Venezuela y sobre el cual, por el momento, no se produjeron cambios significativos.
DANCING MOOD
Presenta su nuevo DVD “Los 100 Nicetos” que fue el registro que se tomó el 3 de octubre pasado en el barrio de Palermo, donde está ubicado desde hace más de 10 años el local “Niceto Club” casa que supo albergar a Dancing Mood y donde este grupo lleva más de 100 presentaciones. En este DVD participan como invitados: Orquesta DELUXE, Deborah Dixon, Pauline Black (Inglaterra), Vicentico, Pablo Lezcano, el Gospel de Argentina, Paula Varela y muchos más… El show de semejante festejo fue en la calle, en las intersecciones de las calles Niceto Vega y Fitz Roy, donde Dancing Mood monto un escenario y un estructura de producción al nivel de un estadio de futbol. El show fue gratuito para el publico seguidor de Dancing Mood y los que no lo conocían, se concentraron para ver el show mas de 20.000 personas.
ESTELARES NUEVAMENTE EN NICETO
Luego de su gira por España, la banda de La Plata vuelve para continuar presentando "Una Temporada en el Amor".
Por Florencia Mon para UOL
Luego de su gira por España y de compartir escenario en el Festival Pirineos Sur con León Gieco, Fito Páez y Calle 13; ESTELARES vuelve a la Argentina para continuar presentando su quinto y consagratorio disco "Una Temporada en el Amor".
Por otra parte, ESTELARES acaba de lanzar "TANTA GENTE", su tercer corte de difusión, y están por terminar el rodaje de lo que será su nuevo videoclip.
Además, ya esta a la venta "AMERICA", un disco compilatorio que incluye los hits de los álbumes "Ardimos", "Sistema Nervioso Central" y "Una Temporada en el Amor".
La banda de La Plata no tuvo suficiente con 2 Nicetos en Junio y quiere más. El domingo 18 de julio vuelve a Niceto Vega y Humboldt a las 20 horas, con Valle de Muñecas como banda invitada.
Las entradas pueden adquirirse desde $35 anticipadas en la boletería Niceto Club (Lu. a Vie. de 12 a 18 hs.) o por sistema Ticketek.
ANDRÉS CIRO Y LOS PERSAS - ESPEJO
Por Claudio Kleiman para la Revista RS
La separación de las grandes bandas, aquellas que supieron acarrear un peso simbólico generando una identificación que va mucho más allá de la música, puede ser -en ocasiones- tanto o más traumática para sus seguidores que para los propios integrantes.En ese sentido, es muy probable que a los miles de chicos que se tatuaron un piojo en algún lugar del cuerpo les cueste mucho más elaborar el duelo por la separación que a Tavo, Micki o Ciro, los únicos miembros originales que quedaban en Los Piojos. Piti hace rato que está con La Franela; Tavo se divierte con Las Pelotas; y Micki (que aparece aquí como invitado) en algo andará. En lo que se refiere a su cantante, Andrés Ciro Martínez, se lo nota liberado, eufórico. Casi diría resucitado. En Espejos, su primer álbum solista -al frente de su nueva agrupación, Los Persas-, suena como si se hubiera sacado un peso de encima. Y esa sensación de libertad se tradujo en un aluvión de nuevas canciones. Son pocos los solistas que en este momento se animan a sacar un disco de 70 minutos con quince temas, pero a Ciro eso no parece haberle preocupado. Seguramente, la novedad de no tener que representar a nadie más que a sí mismo a la hora de componer -y, más específicamente, de escribir letras-, funcionó como un dique que se levantaba y dejaba fluir libremente la corriente creativa. En Espejos reaparece el Ciro más hedonista y sexual (o calentón, si prefieren), el que quiere salir a tocar rock & roll y llevarse las mejores chicas. Nada nuevo, por cierto, pero hay cosas que siempre funcionan.
Y para ese propósito, lo que funciona con una potencia realmente formidable es su nueva banda. Andrés incluye un texto escrito por él mismo en el que relata el proceso que llevó a la formación, contando los pasos de prueba y error, y los músicos que quedaron en el camino. Por lo que aquí se escucha, su intuición (y su oreja) le indicaron las elecciones correctas, porque Los Persas -Juan Gigena Abalos y Juanjo Gaspari en guitarras, Broder Bastos en bajo, Lulo Isod en batería y Chucky de Ipola en teclados- suenan como si tuvieran mucho road encima; diferente de Los Piojos, pero manteniendo los rasgos básicos de la personalidad del cantante, que también se encargó de la producción artística del álbum.
Hay una gran variedad musical en Espejos, pero abunda el rock & roll y el R&B. "Servidor" es un R&B que recuerda la primera época de los Stones; "Banda de garage" tiene un riff con alguna reminiscencia de "You Really Got Me", y ahí Andrés se destaca con su punzante armónica; "Noche de hoy" es un rock gozoso y festivo y "Blues del gato sarnoso" tiene -como muchos de los temas de este disco- una letra que parece autorreferencial ("soy el mejor gato sarnoso que está de vuelta en su hogar") junto a un excelente solo de Chucky, que, dicho sea de paso, hace un gran trabajo a lo largo de todo el disco. En "Rockabily para siempre", Ciro retoma la desfachatez de la primera época de Los Piojos: "Está tan loca, está tan fuerte... sobre el motor, te haré el amor". Pero hay mucho más que rock y blues: el tema que da título al disco y "Ruidos" son como cuentos cortos con un desarrollo casi literario, y un clima entre la ensoñación y la pesadilla. "Insisto" es una canción pop con intro beatle y deliciosos arreglos vocales, y "Paso a paso", con la voz invitada de Micki Rodríguez, un reggae con mensaje latinoamericanista y contestatario. Los piojosos van a disfrutar con "Chucu-chu", una de esas típicas marchas saltarinas, con referencias a la droga y citas de "El fantasma de Canterville" y "Ñam fri frufi fali fru". "Malambo para Luca", un hermoso homenaje a quien es seguramente la máxima influencia de Ciro, cuenta con la participación de La Chilinga y Diego Arnedo. Pero quizás el más confesional sea "Vas a bailar", un midtempo que es también uno de los grandes temas del álbum. Aunque aparentemente está dedicado a una chica, Andrés parece estar hablándose a sí mismo cuando dice: "Si ser lo mismo es virtud / vos sabés bien que también es quietud / si anda rondando la felicidad / no tengas tanto temor de cambiar".
SIN CAMBIOS EN LA SALUD DE CERATI
Fuente: blog.rock.com.ar
La familia de Gustavo Cerati ha publicado hoy martes un nuevo mensaje en su página oficial, a través del cual comunica que no se han producido cambios significativos en su estado de salud.
texto completo dice:
Sabemos a traves de tantos mensajes que recibimos que están atentos al estado de salud de Gustavo. Si no subimos actualizaciones, no es que los olvidemos o no los tengamos en cuenta, sino que no se han producido aún cambios significativos.
Queremos trasmitirles tranquilidad y hacerles saber que cuando haya noticias serán compartidas con todos ustedes.
Les agradecemos la calma y el acompañamiento.
Gracias por todos los mensajes de apoyo para Gustavo y su familia. Leemos cada mail recibido, pero nos es imposible responder a todos.
Por favor sigan escribiendo.
Muchísimas gracias.
Por otra parte, en estos días el músico colombiano Juanes realizó un cover del tema “De música ligera”, que compartió vía Twitter.
PEDRO AZNAR: “NO LUCHO CONTRA MIS MIEDOS, ME LOS BANCO”
En esta entrevista con Estilo, el ex Serú Girán se sorprende de cómo los medios conviertieron un reciente chequeo médico en una "grave internación".
Pedro Aznar: “No lucho contra mis miedos, me los banco”
Por Alejandro Ortega – para losandes.com.ar
Pedro Aznar atiende el teléfono distendido desde su casa. Recién llegado de Shangai (China), en donde sufrió un pequeño traspié de salud que -por cierto- muchos medios exageraron, el ex Serú Girán se dispone a una charla sin prisas.
Con voz tranquila y segura no duda en decir: “estoy muy contento de actuar el próximo jueves en Mendoza. Además, voy a cumplir años allí. Me gusta la arbolada, que la montaña esté cerquita, el aire limpio, la gente, lo diáfanamente limpia que es la ciudad”, dijo.
Es que Pedro celebrará sus 51 años sobre el escenario local, ya que nació en Capital Federal el 23 de julio de 1959. Inquieto, talentoso y con una nutrida trayectoria el ex Madre Atómica (grupo en el que tocaba cuando tenía 15 años) se subirá, a las 21.30, al escenario del Teatro Plaza de Godoy Cruz con un show unipersonal.
“Voy solo con una batería de instrumentos. Voy a hacer de todo, desde repasar clásicos hasta música de otros autores. Va a ser un show muy divertido e íntimo”, adelantó.
-¿Qué es lo que más disfrutás de este tipo de shows?
-Es tan intenso, tanto para mí como para la gente. Es una sensación de alto voltaje, porque como artista puedo comunicar cada pequeño detalle emocional de las canciones.
-No hay dudas de que “Quebrado” tiene gran importancia en tu carrera...
-Sí, porque fue hecho al final de un período de mucho crecimiento y muy difícil para mí. Por eso siempre digo que es un disco maduro. No lo podría haber hecho hace 10 o 15 años. “Quebrado” es un punto de inflexión en mi carrera, hay un antes y un después de este disco. A partir de ahora todo es un desafío.
-Generalmente, ¿sos autoexigente?
-En realidad me gusta desafiarme. No me pongo objetivos concretos exitistas, pero en lo artístico me gusta motivarme y empujarme hacia el próximo nivel.
-¿Tenés un contexto afectivo que también te exige?
-No. Tengo la suerte de estar rodeado de un círculo afectivo muy lindo, de gente que me quiere como soy. El amor que me dan no pone condiciones; es ese tipo de amores con los que realmente florecés porque me quieren como soy. Y es ahí donde la superación personal es más natural y espontánea.
-Cuando te sentás a componer, ¿hay temas que te seducen más que otros?
-La verdad es que no tengo temas fijos. Sino que voy escribiendo lo que me sale, lo que me llama la atención, lo que me preocupa en cada momento.
-¿Y en este momento qué te preocupa?
-No lo sé porque no estoy componiendo (risas). En realidad hay cosas que me dan vuelta de la cabeza, porque existe algo mágico en esto de escribir. Uno lo hace desde un lugar más inconsciente, por intuición. Y después, en una canción, ves todo lo que has vivido durante mucho tiempo. Y es ahí cuando te enterás verdaderamente lo que te ha estado pasando. Componer es como hacer terapia, hipnosis o meditación.
-¿Qué cosas te asustan?
-La locura, la ignorancia, la violencia, la injusticia, el abandono, la soledad no elegida y la muerte.
-¿Y peleás contra esos monstruos?
-No lucho, me los banco (risas). Trato de hacer algo con ellos porque eso también significa vivir. Sentir miedo es absolutamente humano; el tema pasa por cómo convivir con los temores para que no te paralicen y te permitan seguir haciendo.
Para eso, la espiritualidad es una búsqueda de respuestas muy importante y es algo que respeto muchísimo. Porque no sólo refuerza nuestro sentido de trascendencia, sino que es una manera de darle un sentido al estar vivo y al saber que vamos a morir. Creo que una religión puede ser muy útil para acercarnos al otro.
-En tu recital de Shangai tuviste un problema de salud...
-En realidad fue más un susto que otra cosa. En los medios la versión que difundieron fue alarmista. La verdad es que no fue nada grave y ni siquiera estuve internado. Simplemente, me hice un chequeo porque sentía adormecido el brazo y la pierna izquierda, pero era un problema cervical. No voy a negar que me asusté, pero pude tocar y viajar sin problemas.
-En muchos medios argentinos, la noticia no era tan alentadora...
-Creo que hoy, en los medios de comunicación, cuando suceden este tipo de hechos, hay una mezcla de preocupación genuina con morbo. Yo lo viví en carne propia... agradezco el poder haber llegado a contarle a mi familia la verdad antes de que se enterasen por otros canales. Todos mis amigos estaban aterrados, entonces les escribí y los calmé.
Sé que es inevitable el teléfono descompuesto, pero lo que me preocupa es que no se chequeen más las fuentes. Estuve viendo en Internet y muchos medios tomaron la noticia de un medio que la había sacado mal y nadie investigó. Eso habla sin dudas de una pereza periodística que me preocupa.
-¿Sos de los que se cuidan todo el tiempo la salud o de los que rehúsan la visita al médico?
-En realidad, no me gusta ir al médico o al dentista, pero cuando hay que ir voy. Pero respeto mucho el don de estar vivo, me parece algo asombroso y lindo. Para mí, subirme al escenario y comunicar una emoción es una responsabilidad y me lo tomo alegremente en serio. Cuidarme a mí mismo tiene que ver con eso. Me cuido, como bien y descanso lo adecuado, porque siempre quiero estar al 100%.
-Charly García iba a estar en Mendoza, pero pospuso su show, ¿cómo lo ves a él?
-Hace poco almorzamos juntos y lo vi súper bien, la pasamos muy lindo. Creo que estamos disfrutando de una relación muy afectuosa y muy cercana como hace mucho no teníamos. Estoy feliz por este acercamiento.
-¿Y cuándo los volveremos a ver juntos sobre un escenario?
-Siempre, cuando nos juntamos, comentamos la idea de volver a tocar, pero por ahora no va a suceder.
COMENZO LA 6ª TEMPORADA DE PETER CAPUSOTTO Y SUS VIDEOS
El delirio es una cosa seria
Por Emanuel Respighi para Pagina/12
“¿Y ahora, qué?” Esa es la pregunta que, palabras más, palabras menos, a la mayoría de los seguidores de Peter Capusotto y sus videos se les viene a la cabeza cada vez que una nueva temporada del ciclo de humor está a punto de comenzar. El escepticismo sobre si los nuevos personajes estarán a la altura de Pomelo, Juan Carlos Pelotudo, Violencia Rivas o Bombita Rodríguez reaparece con cada nuevo año, ante el desarrollo de un ciclo que redobla la fidelidad de su público temporada tras temporada, con creaciones que nunca dejan de sorprender. Y bastó ver el primer envío de la sexta temporada del programa que Canal 7 emite los lunes a las 22.30 para, una vez que las carcajadas le cedieron paso a la reflexión, concluir que Diego Capusotto y Pedro Saborido lo hicieron de nuevo. Lejos de repetirse, la dupla creativa supo reinventarse una vez más con clásicos personajes que conservan intacta su agudeza y nuevos que no sólo no defraudan, sino que logran superar a lo viejo bueno conocido. La carcajada televisiva rendida a sus pies.
A contramano de lo que creen la mayoría de los reconocidos productores y programadores locales, que en estos tiempos admiten al humor sólo en relación con el archivo televisivo, el debut 2010 de Peter Capusotto y sus videos volvió a demostrar que el de los programas de humor en formato de sketches no es un género vetusto o pasado de moda. Y que tampoco conlleva necesariamente grandes erogaciones de dinero. Con pocos recursos y mucho ingenio, el programa que parodia la política, el rock y las instituciones es la comprobación más certera de que el humor en televisión no tiene fecha de vencimiento. Siempre y cuando la creatividad sea el elemento dinamizador de una idea. Por sus segmentos de no más de 7 minutos, su humor corrosivo y el desarrollo de sus criaturas, Peter Capusotto... es la síntesis perfecta entre los viejos programas de sketches que supieron instalar comediantes como Darío Vittori o Alberto Olmedo y los actuales tiempos mediatizados.
Uno de los momentos más desopilantes que dejó el primer programa de esta temporada, de esos que literalmente son para descostillarse de risa frente al televisor (o la computadora, ya que apenas finalizó el envío ya había videos subidos a YouTube), fue la presentación de un nuevo personaje: Jesús de Laferrere, “el predicador rolinga”. Suerte de pastor de fuerte ascendencia en la comunidad, usa flequillo como inequívoco símbolo identitario (“sin el flequillo te sentís un minusválido”, afirma un miembro de la cofradía que en el sketch perdió su pelo en la frente cuando se lo quiso secar en un microondas), Jesús de Laferrere utilizó los códigos rolingas para evangelizar a sus fieles con frases como “todavía no partáis de esta tierra, tened muchas birras que tomar”, o explicándoles que no hay que ofender a los que “no son del palo”, porque “Dios creó al careta para que vosotros tengáis un peso para la birra”. El “sermón en el maxikiosco”, donde de un pancho y una cerveza el Mesías Rolinga alimentó a una frondosa tribu stone, con lluvia de papas fritas incluida para alcanzar la “felicidad plena” de la masa, fue antológico.
Otra de las nuevas criaturas surgidas de la delirante dupla Capusotto-Saborido fue ConSumo, un grupo de rock que parodia a la banda liderada por Luca Prodan. Presentada como “la banda que nos da la salida a estos tiempos de angustia y decepción”, se destaca por letras que apelan a que la única solución para alejarse de la depresión y la alienación social es el consumo desmedido de cualquier cosa. “Antes pensaba en la existencia de Dios y todas esas boludeces. Ahora mandé todo a la mierda y consumo como estilo de vida”, dice a cámara el líder pelado de ConSumo, en un dificultoso español. Así, sobre “La rubia tarada”, el grupo estimula la compra desenfrenada de sus fans de todo tipo de productos (como la Wii Drive Ass, que “no se maneja con cable ni controles, sino con el ojete”), proponiéndoles “mejor comprar/en ocho cuotas”.
Continuando con el mundo de la música, con Joaco del Garzo Peter Capusotto parece reírse de aquellos cantautores españoles que llegan al país y por sus declaraciones parecieran ser más argentinos que los propios nativos. Con un look que hace recordar a Joaquín Sabina y a Manolo Galván, el personaje que hará “74 funciones en el Luna Park” tiene letras que despotrican abiertamente contra Argentina (“La Argentina es una mala fotocopia de Europa/una España de segunda”) y demuestra su estrecha relación con la noche, el amor casual y la bohemia desde el mismo título de sus temas, como “Tendrás sexo conmigo y después te echaré a la mierda”, “Si te dije que te quiero es porque estaba drogado” y “Prefiero estar sólo a tener que amar a una mujer como tú”, entre otros.
Siguiendo con las novedades de Peter Capusotto, dentro del concurso “¿Qué está bailando este idiota?”, donde el público debe adivinar qué canción está escuchando un bailarín por el sólo movimiento de su cuerpo, el programa se animó a satirizar al mundo publicitario y periodístico. En el aviso de la cerveza “Alceimer” se contó como “maní, cerveza y cuatro pelotudos de previa” puede desencadenar en una batalla sangrienta por la ingesta excesiva de alcohol. Además, el programa contó con un flash en el que Sergio Lobestia, “el periodista más bruto de Latinoamérica”, alerta sobre la posibilidad de que se produzca un “tiramisú” en las islas del Caribe, en vez de anunciar la amenaza de un “tsunami”.
A las nuevas criaturas se sumaron en el primer envío la presencia de Micky Vainilla y Violencia Rivas, clásicos que regresaron más intransigentes que nunca. Además, Peter Capusotto... anunció para el próximo envío la presentación en sociedad de Ramita (“un hombre que requiere sin querer de un don especial”), Los Marrone (“una banda que construye su carrera buscando problemas con la policía”) y el regreso de Bombita Rodríguez, “que si no aparece –anunció el locutor en off–, va al programa que le sigue, que es el tercero. Pero seguro sale en uno de los dos”. Volvió Peter Capusotto y sus videos con las dosis de autenticidad, creatividad y delirio que lo distinguen del resto de la programación de la TV argentina y lo vuelven una propuesta tan única como irresistible.
ESPEJOS, PRIMER ALBUM “SOLISTA” DEL EX LIDER DE LOS PIOJOS
Para Ciro lo que es de Ciro
Acompañado por Los Persas, un sexteto con amplitud rockera, y después de su separación de la banda del oeste bonaerense, el cantante ensaya aquí futuros caminos, sin dejar de hacer base en el rock n’ roll y el blues de las orillas rioplatenses.
Por Luis Paz para Pagina/12
Habitualmente, quien se enfrenta a un espejo con la actitud clara de mirarse a sí mismo olvida que lo que se proyecta no es solamente la propia imagen, sino también el contexto, lo que hay alrededor. Inevitablemente, su pasado como eje de Los Piojos, el ambiente tecnológico del rock moderno y los picos del recorrido histórico del clásico se confunden en Espejos, el disco con el que Andrés Ciro vuelve a mirarse en las bateas por estos días, en compañía de Los Persas. La principal virtud de álbum es que no se pierde del otro lado del espejo. En lugar de eso, soporta sobre el lomo de su notable portada, sin complejos, eso que es: una presentación y menú de posibles futuros platos, cocidos por un sexteto con amplitud rockera, pero que hace base en el rock n’ roll y el blues de las orillas rioplatenses.
“Qué placer verte otra vez, nos decimos sin hablar. Hoy todo vuelve a empezar y será lo que ya fue”, explota el cantante en el estribillo de “Antes y después”, el corte con el que quedó presentado para la sociedad radiofónica Ciro y Los Persas: el tecladista Chucky de Ipola, los guitarristas Juan Gigena Abalos y Juanjo Gaspari, el bajista Broder Bastos (sesionista de Bossa & Stones, entre otros) y el baterista y percusionista Lulo Isod (con pasado en Virus y Tres Bien Ensemble). La frase de Ciro no hace menos que recordar sus días con otros compañeros. A grandes rasgos, Espejos no se separa demasiado, tampoco, de la línea trasgenérica del Ciro piojoso. Pero ¿era eso inesperado?, ¿es eso señalable? Para nada, a Ciro lo que es de Ciro, la facilidad para cantar con una potencia cadenciosa sobre un blues, un reggae o un malambo, para ser introspectivo o explosivo.
“Servidor”, el segundo de los 14 temas del álbum, tiene una clave swing algo disco-funk propia de los Stones de los ’80. “Banda de garage” va a lo más crudo de Jagger y lo mezcla con el hard rock australiano, lo que lo pone como candidato a un segundo corte más bien rockero. La canción “Vas a bailar”, en cambio, se impone como corte melódico: “Vas a bailar como si fuera la última noche, uh uh uh uh uh uh uh”. La onomatopeya no se mancha para Ciro, que hasta tararea un solo de saxo sobre un blues acelerado. Y en Espejos hasta es posible, en “Paso a paso”, una suerte de reggae del altiplano (con armónica en lugar de acordeón, eso sí). Los aportes de Alvaro Villagra en la producción y el Pollo Raffo en arreglos de cuerdas y vientos terminan de pulir este debut que no es tan debut. El primero, aportando una potencia inesperada a la música propuesta. El segundo, con una sabiduría y buen gusto impecables para vestir la canción.
Hay pocas cosas que no cierran bien si se mira la totalidad, pero no son graves. Una es la falta de definición en algunos bajos, que sin embargo no va en detrimento del groove. La otra, ciertos vicios en la dicción que Ciro se niega a guardar; aunque eso, en última instancia, ha sido también otro de sus sellos distintivos. Y entre lo más saliente se aparecen las teclas de Chucky de Ipola y el constante diálogo juguetón entre las guitarras de Gigena Abalos y Gaspari, como digno cortejo de una voz más expresiva y performática, lejana al arengue y cercana al reflejo melódico.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario