TIPITOS DE CUMPLEAÑOS
El sábado presentaron su nuevo disco, "El club de los martes", en el Luna Park.
Por: María Vivanco
La correa plateada y llena de brillos en el hombro de Raúl Ruffino (voz y guitarras) fue lo primero que se vio en el escenario. La banda estaba de festejo, se cumplían 16 años desde su primer recital. Fue una noche en la que pasaron distintos climas: yendo desde lo vibrante y eléctrico hasta lo meloso, que se sintió con las guitarras criollas, la percusión suave y las luces rojas que inundaron el lugar. "Nos vamos a elongar un poco, para abordar el tema del amor", dijo Federico Bugallo (bajo y coros) mientras daba paso a Pablo Tévez (que corrió de la batería para tocar la guitarra) y al músico invitado Facundo Valdez. Con Para cambiar y Jurame relajaron por completo el ambiente. En una pausa, charlando con el público y antes de pasar a la última parte, no faltó el abrazo a Gustavo Cerati y los deseos de que se recupere.
Con el clásico recorrido por los principales hits de la banda, lograron sacudir al Luna Park y, ya para el final, muchos se acercaron al escenario para saltar y corear con Flor negra y Campanas en la noche. Terminando, Walter Piancioli se alejó de los teclados y agarró la guitarra. "Para que no digan que Los Tipitos no sabemos tocar rock", dijo y cerraron la noche, acompañando las ganas y el ánimo de la gente, con el frenético Rock de los patitos.
ENTREVISTA AL “TANO” MARCIELLO
“Integro una de las bandas más poderosas del metal”
La formación actual de Almafuerte
Finalmente esta noche, a las 21.30, Almafuerte tocará en La Plata, tras la postergación de su show en el último mes de marzo. Los amantes del metal pesado “argento” deberán acercarse hasta el Teatro Ópera (58 e/ 10 y 11) para absorber toda la potencia de este grupo formado en 1994 y que tiene al frente a Ricardo Iorio.
"Lo que hacemos es recorrer toda la discografía y tocar temas del último material Toro y pampa. También sumamos alguna canción de V8, una o dos de Hermética y hay una parte en la que quedo solo y hago dos o tres temas, porque lo que pasa ahí arriba es que nosotros venimos tocando hace tiempo, entonces a alguno se le ocurre algo en el momento y lo tocamos", fue lo que explicó Claudio "Tano" Marciello (guitarra) con respecto al recital de esta noche.
Almafuerte, cuya formación actual se completa con Bin Valencia (batería) y Beto Ceriotti (bajo) se caracteriza por su potencia arriba del escenario. "Creo que definitivamente la banda es muy potente. En vivo sobre todo, hay un despliegue de expresiones increíbles de cada uno de los músicos, del diálogo de Ricardo con el público, de la guitarra y la batería, que es increíblemente poderosa; y lo mismo pasa con Beto y el bajo", reconoció el Tano, que se define como "muy del espectáculo en vivo" porque no es "de escuchar mucho los discos que hacemos. Voy versionando los solos una vez que tengo incorporado el ritmo, pero respeto el armado de la canción. Me gusta cuando comenzás a improvisar o cuando son esos conciertos que en vivo hay un potencial mayor al que está plasmado en un disco. Y lo que hago más que nada es improvisar las propias canciones que tenemos".
–¿Están trabajando en un próximo disco?
–Hay cosas, pero no creo que sean para este año. Está avanzado en lo musical, hay algunas letras pero estamos tomando más tiempo, creo que va a tener que esperar hasta al año que viene. Yo compuse mucha música para el próximo disco, tengo un pequeño estudio casero y lo que hago es grabar y darle más que nada ese material a Ricardo, las canciones para que él vaya escribiendo. Y una vez que hay 12 o 13 canciones decidimos si grabamos o no. También está la realidad de que no tenemos presión discográfica y por eso nos podemos tomar más tiempo. Además, creemos que hay un momento donde se fusionan bien los pensamientos y la energía. A veces se puede terminar un disco en una semana, pero en este caso no.
–¿Qué significa para usted tocar al lado de un ícono del rock como Ricardo Iorio?
–Y… Lo que pasa es que estoy tan acostumbrado ya. Vamos para los 16 años juntos. Ricardo es un músico al cual respeto, es un gran poeta, escribe muy bien y hay un respeto muy grande entre los dos y eso hace que la cosa funcione con potencia”.
En paralelo. Identificado es el nombre del tercer disco del Marciello, que lanzó su carrera solista en simultáneo a su trabajo con Almafuerte y también editó Puesto en marcha (2001) y De pie (2004). Para este último CD el músico cumplió diferentes roles, ya que se ocupó de la producción artística, las guitarras eléctricas, acústicas, el bajo y la voz.
"¿Vos te enteraste que saqué un disco que se llama Identificado? Porque yo todavía no lo escuché en la radio, estoy esperando que lo difundan. Eso significa que no soy comercial", precisó el artista. Y resaltó que a pesar de que "ahora en el rock entra cualquier cosa", él descubre permanentemente "muy buenas bandas que tocan de soporte nuestro o que nos llaman de invitados y yo apuesto a esta juventud, que no es lo que se ve en Policías en acción, hay otra parte, el progreso".
Marciello destaca los trabajos de Black Amaya y Willy Quiroga, tipos que al igual que él "no entraron en la música pensando en hacer eso por éxito, porque sino no estaríamos tocando todavía. Esto es un gran sacrificio, este tipo de rock lleva este sacrificio: a tocar de por vida".
– ¿Qué diría de estos años en Almafuerte?
–Que soy una persona muy agradecida, por la trayectoria y por el idioma que tenemos gracias a la gente. Yo vivo de la música, toco la guitarra y pertenezco a una de las bandas más poderosas del metal pesado.
RATONES PARANOICOS
El rock de los Paranoicos sonará fuerte en el Salón Dorado de la Casa de Gobierno. La banda liderada por Juanse se presenta en el marco del ciclo Puertas Abiertas
Los Ratones Paranoicos se subirán, mañana a partir de las 21, al escenario del Salón Dorado de la Casa de Gobierno (6 entre 51 y 53) en lo que será una nueva fecha del ciclo Puertas Abiertas al Bicentenario.
El 4 de mayo pasado se realizó la presentación de este novedoso programa que fue calificado por el propio gobernador Daniel Scioli como "cultural, recreativo y educativo", y que consiste en realizar visitas guiadas por el Palacio de Gobierno Provincial y la residencia del gobernador, shows musicales, cine y espectáculos infantiles.
Juanse, líder de los Ratones, estuvo presente en la inauguración de Puertas abiertas y declaró que el grupo "respalda" la iniciativa porque "está relacionado con algo muy importante para todos nosotros, el bicentenario de nuestro país" y agregó que con este ciclo "se van incorporando todos los estilos que a medida que va pasando el tiempo se van transformando en verdaderas pertenencias afectivas y también estéticas".
Luego de las actuaciones de Los Pericos, Adriana Varela, el Bahiano y Sexteto Mayor, llega el turno de esta banda de rock cuyos inicios se remontan al año 1984 y que hoy la encuentra con su formación original: Juan Sebastián "Juanse" Gutiérrez (voz y guitarra), Rubén "Roy" Quiroga (batería), Pablo "Sarcófago" Cano (guitarra y coros) y Pablo Memi (bajo) - quien regresó al grupo luego de que su lugar fuera ocupado, desde
Los Ratones Paranoicos arribarán a la ciudad de la mano de su último y homónimo disco, que contó la producción de Andrew Oldham, encargado de llevar adelantes algunos trabajos de Los Rolling Stones, Rod Stewart y Eric Clapton. Además, una de las figuras invitadas del reciente álbum es Luis Alberto Spinetta, que co-escribió y cantó "Sacrificio japonés", primer tema de difusión. Los otros artistas que colaboraron en el álbum fueron Alex Lora (El Tri) y el dúo español Pereza, en la canción "Te extraño".
Todas las actividades de Puertas Abiertas al Bicentenario son gratuitas y esta no es la excepción, ya que las entradas para los espectáculos se pueden retirar cada semana de miércoles a domingo, de
Según pasan los años. En el concierto de mañana se escucharán las 11 canciones de Ratones paranoicos (2009) que hicieron delirar a más de 6 mil personas el pasado 21 de mayo en el Estadio Luna Park, y tampoco faltarán los "clásicos".
"Nos manejamos dentro de un límite real de nostalgia pero también tratando de esquivarla un poco. Me encanta rememorar viejas épocas o encomendarme a mí mismo la misión de soportar verme cuando tenía 20 años menos", fue lo que dijo Juanse en una entrevista con la radio Frecuencia Zero (FM 92.5). El cantante quiso dejar en claro que durante todos estos años de carrera ellos se mantienen "hidalgos frente a la historia de tener que salir a tocar al escenario".
Al mismo tiempo, el músico reconoció que a esta altura "no necesitamos demostrarnos nada a nosotros mismos" y aunque le "encanta" que los shows "estén hasta las pelotas" ya no le preocupa tanto la cantidad de público que asiste a los recitales.
Ratones Paranoicos es considerada una de las bandas más importante del rock nacional y hoy, habiendo transcurrido más de veinticinco años de tocar y tocar, siguen vigentes. Las palabras de Juanse con respecto al camino realizado por la agrupación fueron "sería un balance un poco trastornante y muy poco revelador" analizar la trayectoria, pero aclaró: "nosotros lo que tenemos que hacer es ensayar, esa es mi función. Ya no me interesa mostrar tanto lo que hago, como me interesa ensayar. Ensayar y crear en el ensayo, y pintar. Eso es lo que nos mueve", según el cantante y no que haya 10, 20 o miles de personas escuchándolos.
También habló acerca del destino, que "no te va a dar ningún tipo de rayito de Sol. El destino te impone que manejes lo que te dio origen que es el trabajo, el trabajo artesanal. Después vendrán los ritos, las creencias, las mitologías, esas son consecuencias. Ahora nosotros jugamos a entender, eso es lo que hacemos".
MEJORA LA SALUD DEL MÚSICO
Autorizan el traslado de Cerati a Buenos Aires
Así lo aseguró el jefe de Cuidados Intensivos de la Clínica la Trinidad de Caracas donde Gustavo se encuentra internado desde hace 19 días tras padecer un ACV. El especialista explicó que no se trata “del alta médica” sino que es un permiso para el viaje “porque presenta un estado general que le permite afrontarlo”.
La salud de Gustavo Cerati mejora y por ello los médicos de la clínica La Trinidad de Caracas autorizaron su traslado a Buenos Aires para que el músico continúe su tratamiento en el Instituto Fleni de la Argentina.
El edema cerebral que padece Cerati se redujo en las últimas horas y los médicos no evidencian infecciones activas, de acuerdo con el último parte sobre la salud del ex líder de Soda Stereo dado a conocer en su página oficial de internet, el último miércoles.
Debido a esta leve mejoría, Antonio Martinelli, jefe de la unidad de cuidados intensivos de la clínica La Trinidad confirmó desde Caracas que el músico ya puede ser trasladado a la Argentina, según relata el portal 24CON.
“El paciente está estabilizado y respira por sus propios medios. No es que le dimos el alta médica, sino que autorizamos el viaje porque presenta un estado general que le permite afrontarlo. Ahora todo depende de gestiones burocráticas”, dijo Martinelli.
La familia del cantante quería que el traslado se realizara al Intituto Fleni de Escobar, pero debido a que ese centro es de rehabilitación, y Cerati aún no llegó a esa etapa de recuperación, sería internado en la sede de Belgrano del centro médico.
La madre, los hijos y la pareja actual del músico, como así también su ex esposa, están en Caracas siguiendo de cerca su evolución.
TODOS TUS MUERTOS
“LA REALIDAD NOS DA LA RAZON”
Luego de una década, TTM manteniendo su mensaje de justicia, paz e igualdad con “Crisis Mundial”, su nuevo disco. Félix Gutiérrez, bajista y fundador, habla sobre este nuevo material y la de sus vigencia de sus letras.
Fuente: Esquina Rock.com.ar
Cuando Todos Tus Muertos irrumpió en el rock nacional a mediados de los ochenta, rápidamente fue considerada como banda de vanguardia. Su mezcla de estilos y letras que reflejaban la situación social y el sentimiento de resistencia que reinaban en el ocaso de la dictadura militar conformaban un coktail inusual para la época. Con el mismo compromiso de antaño, TTM entrega su primer disco de estudio del nuevo milenio (el noveno de su carrera y sucesor de "El camino real", editado en 1998) que se sumerge en problemáticas del mundo actual (crisis, la desigualdad, la intolerancia, el hambre, las invasiones, la manipulación de la información que ejercen los medios) al ritmo del ska, punk, rock, hardcore y reggae. El material en cuestión es “Crisis Mundial”, que cortó con doce años sin nuevas canciones de este quinteto conformado actualmente Pablo Molina (voz), Felix Gutiérrez (bajo), Horacio “Gamexane” Villafañe (guitarra), Christian Fabrizio (batería) y Germán Álvarez (teclado). “Tiene un poco de todo: Hay temas que los compusimos en el estudio (‘Embrujados’, ‘El reventón’ y ‘Nuestros hijos’), otros que los veníamos tocando en vivo desde hace tiempo (‘Sea lo que sea’ y ‘Pulso’), algunos que quedaron fuera de discos anteriores (‘El ritual de la muerte’) y también hay canciones como ‘Crisis mundial’ que tocábamos con la banda que teníamos antes de TTM, que se llamaba Los Laxantes”, cuenta Gutiérrez, sobreviviente de los inicios del grupo junto a Villafañe. Mas allá de las composiciones propias, los músicos incluyeron , “Punky Reggae Party”, canción compuesta por Bob Marley y Lee Perry en 1977 que fue lanzada como Lado B del clásico “Jammin'”. “Nos gusta Bob Marley y, tanto el titulo como la letra, nos identifica. Decidimos hacer una versión libre del tema respetando lo que dice la letra, pero en español”, reconoce el bajista.
-La banda se volvió a juntar en el 2004, mediante una invitación de Los Auténticos Decadentes para participar en el festival Quilmes Rock ¿porqué tardaron casi 6 años en darle vida a este nuevo material?
-FG: En el medio salió ¨Reunión 2006 en vivo¨, un disco que se vendió en los shows y fue editado en España por ¨Maldito Records¨. Pero la verdad es que se nos complico a la hora de lograr producir un disco de estudio, y eso que fuimos lo mas austero que pudimos para grabar “Crisis mundial”...
-TTM arrancó a mediados de la década del ’80 con un mensaje que hoy se mantiene vigente ¿que les genera?
-FG: Parece que la realidad nos da la razón y no se puede estar muy feliz con este panorama...Lo único que parece haber cambiado es que la gente hoy reacciona ante el abuso de poder, cosa que antes no era muy común de ver por lo menos en esta parte del mundo, donde la represión y la impunidad crearon un estado de sumisión que todavía hoy padecemos.
-¿Cómo sienten que recibió el público argentino a TTM desde que se reunió definitivamente? ¿Perciben que hay una “apertura de cabezas” que antes no existía y que ayuda a que bandas que no hacen sólo rock también sean
masivas?
-FG: El publico nos dio su apoyo, eso nos empujo a seguir adelante cueste lo que cueste. Es algo importante cuando salís de la sala de ensayo y mostras a todos lo que vos haces, el publico también cambio a traves del tiempo: Hoy en día es muy común que en un festival se junten bandas de estilos muy diferentes, sin que eso genere conflicto en el publico.
-¿Cómo ven la escena actual del rock argentino? ¿En qué se diferencia con aquella de la década del ’80?
-FG: En los 80, la gente estaba en un estado de liberación mas instintivo. Las bandas querían hacer música nueva y estaban tocando en los bares de Buenos Aires muchas veces para los que estaban ahí. Me acuerdo de ir a ver a Sumo en lugares donde la gente estaba sentada y éramos 4 o 5 paradas frente al escenario arengando. Hoy los estilos están definidos y existen muchas bandas clonadas preocupadas por la popularidad mas que en ser originales.
-¿Cuál fue la mejor etapa de TTM?
-FG: Hacer música, tocar en vivo, grabar, componer una canción, todo forma parte de lo que venimos haciendo para llevar la banda adelante. Cada momento que pasas haciéndolo podes generar algo nuevo y, a la ves, tenes que adaptarte a lo que viene. Cada parte tuvo sus cosas buenas y malas..
-Los cambios generalmente renuevan las energías ¿qué recuperaron en esta etapa “post Fidel”?
-FG: Bueno el hecho de seguir tocando cambiando de cantante es un desafió por el que pasaron muchas bandas. A veces parece difícil pero, cuando logras salir adelante, te hace sentir mas fuerte como grupo.
-Musicalmente, TTM siempre se caracterizó por mezclar distintos estilos en sus discos ¿de las nuevas corrientes hay alguna en la que les gustaría incursionar?
-FG: Lo de mezclar estilos es algo que se da sin premeditación, generalmente surge de improvisar. Cada canción tiene un ritmo particular al que se le pueden sumar cambios, partes diferentes y, si logramos sostenerlo, queda; sino sacamos la tijera musical y se va sin remordimientos.
-En un momento estuvieron ligados a un sello discográfico, pero después volvieron a la independencia ¿cuáles son las ventajas / desventajas de ser independientes?
-FG: La ventaja de ser independiente es que nos dio la posibilidad de tener un lugar desde donde poder expresarnos libremente a nosotros y muchos otros grupos que eligieron ese camino.
LA TRIFASICA PRESENTA "AL BORDE"
El sábado 12 de junio La Trifásica presenta "Al Borde" en "Buenos Aires Club" en Capital Federal.
La Trifásica es un trío de rock, funk y blues que se forma en 1998. Ariel Galiano (Bajo y teclados) se ha desempeñado como músico de sesión y ha sido miembro fundador de Los PH, un grupo de de rock y blues. Por su parte, Carlos Damiano (guitarra, voz y teclados) también ha tocado como sesionista, y participó en Expreso Oeste y Los PH.
En 2009 editaron "Al borde" con, Enzo Gullo y Santiago Casanova (ambos en batería) en remplazo de Juan Rodríguez ex Baterista, que integró bandas clave en la historia del Rock Argentino, como Sui Generis o Polifemo, y años más tarde también tocó con Ricardo Mollo, Miguel Cantilo, JAF y Botafogo, entre otros que también tocó los parches en el tema "Tal vez mañana"
EL ANTIGRUPO HA NACIDO: LOS ODIO
Con músicos de Molotov y Café Tacuba, entre otros, llega el nuevo súpergrupo mexicano.
PorPedro Irigoyen
Juntos han creado una bestia. Ellos son Paco Huidobro (guitarrista de Fobia), Jay de la Cueva (vocalista de Moderatto), Tito Fuentes (guitarrista de Molotov), Quique Rangel (bajista de Café Tacuba) y Tomás Pérez (baterista de La Lupita). Todos con años dentro de la escena rockera para formar Los Odio, el nuevo súpergrupo mexicano que toca esta noche en el Festival Ciudad Emergente.
¿Cómo nace la banda? Paco : En lugar de ir al psicoanálisis, hice canciones. Las escucharon mis amigos, que son ellos, y me obligaron a grabar el disco, tocarlo en vivo y a consolidarnos como banda. Es lo mejor que me pasó en 23 años de carrera. Estar con los mejores músicos que conozco, que también son las personas más agradables con las que pueda compartir un viaje.
Tito : Tal como lo plantea Paco, todas las cosas que no nos late hacer como grupo, la expectativa, la prensa o la hueva de la logística, acá no van, esto es más como viaje de amigos.
¿El proyecto se consolidará con el paso del tiempo o es pasajero? Paco : Un grupo no se consolida con el éxito masivo, sino cuando cada uno de sus integrantes defiende a muerte al resto y lucha, aporta y trabaja por la banda. Tenemos experiencia como para que sea más sencillo, ya no equivocamos en nuestras carreras y sabemos cómo no llegar a los puntos desagradables. Nunca me ha gustado hacer entrevistas, porque en mi otro grupo no me dejan hablar (risas generales).
¿Pero cómo se imaginan en tres años? ¿Juntos y aún tocando? Paco : Nos lo imaginamos a mucho más largo plazo. El chiste es que la diversión no se acabe. Si te lo tomas como una profesión, puede arruinar la amistad, las canciones, todo. Entre los cinco sumamos más de cien años de experiencia en escenarios.
¿Quién eligió el nombre? Paco : Yo, porque mis compañeros del otro grupo decían que nada me gustaba. Les dije que iba a hacer el antigrupo, la cosa más negativa del mundo y que se llamaría Los Odio. El juego de palabras funciona, es una sensación que tenemos todos los días. Vamos a una oficina de Gobierno a pagar un trámite y nos hacen dar veinte vueltas, los odio. Hay tráfico, los odio. Si tengo que pagar impuestos, los odio. Si debo pasar un puesto de seguridad en un aeropuerto, sobre todo en Estados Unidos, los súper odio. Como ves, todos podemos usarlo en algo diario.
Salvando las distancias, el estilo y el idioma, su música suena como la versión chicana de bandas como The Strokes o Arctic Monkeys, o más atrás con artistas como Iggy Pop o Lou Reed, ¿se sienten identificados con la comparación? Paco : Iggy Pop es mi padre de alguna manera, Lou Reed también. Los Arctic Monkeys son buenísimos, pero me parece más a un reciclado de cosas. A nosotros nos tocó ver en primera persona la generación del punk, del rock más burdo de principios de los ochenta. Los Pixies o Sonic Youth son influencias también. Pero aquí, el verdadero objetivo de nuestro grupo, es reclutar a Calamaro para la banda (risas).
ANDRÉS CALAMARO
“En el fondo, no tengo verdadero talento”
Por Nicolás Igarzábal - Especial para el Suplemento sí!
El primero que pregunta, el que rompe el hielo en esta entrevista, es Andrés Calamaro. “¿Cuál es el último libro que leíste?”. Hay una explicación: “Eso era lo primero que te decía Luca cuando lo saludabas, me acuerdo de muchos diálogos con él. Eligió vivir como vagabundo, sin bienes materiales, pero era un tipo culto, con una educación exquisita. En los estudios siempre coincidíamos Sumo, Virus, Riff y Los Abuelos. Luca dejó una influencia enorme tirando abajo ese castillo de naipes que se supone que es un disco bien hecho”.
El cantante italiano es apenas uno de los tantos referentes que evoca El Salmón en varias horas de charla, desplomado sobre unos sillones de su estudio Camboya. A su alrededor hay discos de oro y de platino colgados en las paredes, souvenirs de Los Rodríguez, revistas Mojo y Q sobre la mesa, fotos de Julieta Cardinali, una coca-cola light recién destapada y el boxset con los 9 discos de Litto Nebbia y su Celebración del Rock Argentino. La idea del encuentro es desmenuzar su nuevo material, On The Rock. Y cuando Calamaro habla de rock, suelta la lengua (popular) como un reptil: “El rock, o el estado de rock, es algo que definen los músicos en las giras y los discos. Alguna vez fue Emerson, Lake & Palmer, que tenían formación clásica, o King Crimson, que eran vanguardistas y que grabaron el ‘rock perfecto’ con 21st Schizoid Man. Para éste quería hacer algo como el Black Ice de AC/DC, pero después me di cuenta de que iba a tener que escribir mucho y no quería que se convirtiera en un disco de encargo o de laboratorio”.
–¿Tenés momentos de bloqueo a la hora de componer?
–Los músicos vivimos en permanente bloqueo, los momentos pasajeros son los de inspiración. No es que uno vive inspirado y que cada tanto se bloquea. ¡Es al revés! Lo aceptan hasta poetas de otra generación, como Joaquín Sabina. La inspiración te la dispara una crisis sentimental, la cocaína, el opio o emborracharse: Bukowski sin whisky de mala calidad hubiera vivido en permanente bloqueo literario.
–¿Filtraste nuevas influencias para este disco? ¿O te quedás en los clásicos?
–Como todo músico, escucho poca música. Además, las grabaciones nunca las hago con el tocadiscos caliente. Escucho The Horrors, Arcade Fire, The
Calamaro rescata una anécdota de Andrew Oldham al mando de los Stones para graficar el concepto. “Cuando fueron a grabar a Estados Unidos, visitaron los estudios antológicos de Los Angeles, donde se habían hecho los discos preferidos de Mick y de Keith. Entonces se metieron a grabar en uno y Andy vio los atriles para las partituras, y dijo: ‘¿Y eso qué es?’. Le explicaron que ahí se ponían las partituras de los temas para cada instrumento. Y su respuesta fue: ‘Nosotros no grabamos así, nosotros llegamos, calentamos agua para hacer un té, armamos un porro y ponemos el disco que vamos a robar’”.
–¿Aplicás el método?
–No, pero debería. Mi influencia es la ley del menor esfuerzo. Si escucho música en casa, casi nunca son canciones con melodías y letras. Me distraen: la canción de rock me irrita. Me gusta mucho un disco de Thelonious Monk tocando sólo piano. Cuando está con grupo me quema un poco. Pero solo en piano...
La tapa de On The Rock recuerda a logos de empresas nacionales como Gas del Estado o YPF, continuando con la estética de Obras Incompletas. A contrapelo de lo explícito del título (o a cuento de todo lo que puede encerrar el ROCK), tiene una apertura madrileña, con un flamenco (Barcos) apoyado en El Cigala y Niño Josele. Hay latin jazz con Jerry González y Calle 13 (Insoportablemente cruel) y cumbia con Vicentico (Tres Marías). “Cada invitado representa un género y un territorio geográfico en sí mismo”, sostiene el cantante. Después están los rocks del álbum, como Flor de Samurai, Gomontonera, El Perro (¿se acuerdan del programa Día D?) y Me envenenaste (casi flashback de Los Rodríguez más Stones). Mención especial para Todos se van y Los divinos, dos clásicos instantáneos, que podrían haber sido una sola canción. “Son la misma letra, son dos Summertime blues. Hablan de la rebeldía del que se queda en la ciudad cuando la gente se va de vacaciones. Ese verano mío fue el primero del milenio, estaba conmovido por esa revolución en los almanaques, entre el 1999 de Prince y el 2001 de Stanley Kubrick. Fue mi verdadero anti-summer of love”.
–En “Todos se van” cantás: “Tendría que haber nacido antes/ o mucho después”. ¿En qué época te habría gustado?
–Nací en una época complicada, porque cumplí 15 años en pleno auge de la dictadura de Videla, no me tocó una época sencilla. Sin embargo, me considero un hombre con ideales, crecí en los ‘60, en la periferia del Di Tella, en un marco intelectual muy interesante. Soy un joven bastante antiguo como para ponerme a pensar en eso.
Puedo aceptar perfectamente lo que soy y el tiempo que me toca. Vale la pena esperar para llegar a esta estación del tiempo.
–En “El pasodoble de los amigos ausentes” citás a “La Balsa”, “Cambalache” y “Hoochie Coochie Man”…
–Cuando me puse a escribirla, sabía que una canción que nombrara a tantas canciones buenas podía perfectamente fracasar. En la comparación, iba a perder siempre. Sin embargo, es una de las mejores canciones que escribí en los últimos diez años. Es como mi despedida de Madrid y del siglo XX. Es la típica canción findelmundista, posterior a El Salmón.
Andrés quiere volver a su casa a jugar con su hija Charito (que aparece hablando en el track 8, Tres Marías). Queda una sola pregunta pendiente, en honor al protocolo de Luca:
–¿Cuál es el último libro que leíste?
–Volviendo de Posadas a Buenos Aires, estuve leyendo La humillación, de Philip Roth. Es sobre un brillante actor de teatro que de un día para el otro pierde su capacidad y no se puede recuperar. Hasta donde llegué, venía hablando con el representante y le decía: “Siempre había sospechado que nunca tuve verdadero talento”. Me siento muy identificado con el personaje.
–¿...?
–Claro. Me cuesta creer que exista un músico que no haya dudado de sí mismo muchas veces. Hay distintas teorías con respecto al talento. Dicen que el talento principalmente es la capacidad de comunicar y de convencer, por eso yo sé que en el fondo no tengo verdadero talento y que estoy actuando de músico de rock.
VUDÚ FESTEJA SU CUMPLEAÑOS
Ike Parodi (voz), Willy Echarte (guitarra), Mario Lauriño (batería) y Nahuel Antuña (bajo), festejan, en Willie Dixon, el sábado 12 de junio, los 10 años de Vudú sobre las tablas, en un show imperdible y con invitados especiales.
Actualmente, Vudú, se encuentra preparando la grabación de su nuevo material que se realizará en los estudios Circo Beat, y mientras tranto sopla las velitas en el tempo sudamericano del rock, por más de 3660 días de puro rock & roll.
La banda vuelve al ruedo con un giro en su propuesta musical.
Periodista: Pablo Andisco para El Bondi.com
El comienzo parece marcar un puente entre aquel estilo más rocanrolero de los comienzos con los nuevos horizontes, en un mid tempo dominado por la armónica y el tarareo pegadizo, además de la voz invitada de Toti Iglesias para cantar una historia de un desencanto amoroso y refugio en el futbol, los amigos, la cerveza y el rock. La versión de “Canción para mi muerte” en clave hard rock, apenas aplacada por una vueltita de saxo, no hace más que demostrar la imbatibilidad del original.
“Me voy para el norte” muestra una linda melodía de guitarra en una canción rock de estirpe rutera, mientras que “Sólo satisfacción” trae, justamente, lo más stone de la placa. “Amor de barrio” inicia un tándem de baladas también al estilo Jagger/Richards, que continúa con “Sólo sé que te perdí”, con más acústicas y un lindo pianito conectando los versos.
“Tan loco” se apoya en la percusión y la suavidad de las violas, con pequeños impulsos más pesados, generando un clima intimista que se rompe con “Sólo una cuestión de piel” y su rock de vientos, marchoso y ganchero. El camino del rock recibe una pequeña dosis de punk melódico en “Así es la vida”, pero “No te hace mal” vuelve a la armónica, la acústica y recuerda a los slow rocks paranoicos. Para el final queda el rock and roll clásico de “Marilú” y una versión acústica del tango “Por una cabeza”, otra vez con el Toti, en una buena versión, no apta para puristas, claro, pero no muy lejana de la de algunos muy grossos.
Formación nueva, disco nuevo, sonidos nuevos; tal parece ser la receta de
VITICUS
La súper fiesta del rock & roll está llegando a la trastienda... *sábado 12 de junio 23 hs // grabando su primer dvd en vivo!!!
Es menester que sea rock!
La frase tiene sentido cuando se aplica a VITICUS , la banda de rock & roll más importante del país. Y es que graban su primer DVD en vivo el próximo SÁBADO 12 DE JUNIO A LAS 21 HS EN
Liderados por el "carisma divino" de VITICO, su gran trayectoria, el dominio escénico y el cariño eterno de sus pares y fans que lo siguen a todos lados, el bajista de tantas bandas emblemáticas (
Un cóctel eléctrico de alto voltaje, que tendrá invitados varios, un impecable sonido, toda la impronta del vivo y la temperatura adictiva de sus shows!
VITICUS EL DVD!
Con tres discos editados: Viticus (2003), Súper (2006) y Viticus III (2008) la banda prepara la edición de éste su primer DVD.
El material registrará el clima de fiesta y rock & roll que se vive siempre. Habrá varias cámaras, tomas exclusivas que reflejarán la interacción de los músicos y su público.
Además imágenes inéditas de sus giras por el país Vasco, de carretera, testimonios de músicos y personajes y toda la intimidad de una banda única en su estilo y género.
Como bonus track varios temas acústicos que se filmarán en el espeso y húmedo delta, mostrando así la intimidad de una banda que se destaca también, tocando desenchufada.
Definiendo el año habrá shows en todo el país, y la casi confirmada gira anual por España. Con toda la energía recurrente de seguir girando, VITICUS, demuestra una vez más que transforma deseos en proyectos para seguir sumando fans a lo largo del territorio nacional....ES SOLO ROCK & ROLL!
VITICUS es hoy una de las bandas nacionales más respetadas por haber conservado el espíritu del rock, composiciones propias y por ser todo un espectáculo: guitarras de antología, voces y una base rítmica imponente. Después de cumplir 40 años como músico de rock VITICO se da el gusto de seguir rodando con esfuerzo y humildad, y divirtiéndose a lo grande con su banda “familiar” integrada por excelentes músicos.
VITICUS:
Victor “Vitico” Bereciartua : bajo y voz
Nicolas Bereciartua : guitarras
Ariel “Arito” Rodriguez : guitarra y voz
Sebastian Bereciartua : guitarra y voz
Jerónimo Sica: batería.
www.viticus.com.ar
www.myspace.com/viticusrock
Facebook: VITICUS ROCK
“NORMALMENTE ANORMAL"
Con la excusa de presentar su material más reciente, los uruguayos de
“Normalmente Anormal”, es el primer DVD de
El DVD, cuya realización estuvo a cargo de Agustín Ferrando, es una compilación de imágenes correspondientes a 14 años de historia de la banda.
El CD “Directo”, compuesto por 16 canciones, fue grabado durante los conciertos en el Estadio de Ferrocarril Oeste en Buenos Aires (setiembre de 2007) y en el Teatro de Verano de Montevideo (abril de 2008).
El CD “Extra” contiene temas que habían quedado afuera de los discos editados. Incluye, entre otros, “Respira” y fue grabado en vivo con la sola presencia de los camarógrafos.
Cada show de esta gira comenzará con la proyección del nuevo material, y como ya es costumbre, cada presentación será una fiesta imperdible.
LEY NACIONAL DE
UMI, la agrupación Músicos Argentinos Convocados está difundiendo y sigue sumando adhesiones al proyecto de
Principales puntos
1. La creación del Instituto Nacional de
2. El otorgamiento de herramientas que solucionen una parte del proceso productivo de un proyecto musical (vales de para fabricar discos, para grabar, para masterizar, para imprimir arte de tapa, para difusión, etc.).
3. La participación, en las distintas regiones culturales, de las organizaciones de músicos independientes en la distribución de parte de los beneficios otorgados.
4. La creación de un circuito estable de música en vivo en cada región cultural.
5. La posibilidad de mejorar la difusión de música nacional en los medios de comunicación.
6. La creación de un circuito cultural social para acercar el arte musical a sectores de escaso o nulo acceso a esta manifestación del arte
AEROBLUES - Una luz en el desierto
Aeroblues brindó un único y emotivo show, el último viernes en el Teatro Flores, a 33 años de su álbum homónimo. Gustavo “Chizzo” Nápoli, de
Gustavo De Giorgi para Redacción de El Acople
El show, que estaba anunciado para las 20, se demoró dos horas en su inicio. Durante ese tiempo, y cómo era de prever, el público colmó las instalaciones del local.
Si bien el homenaje a la banda que formó Pappo junto a Alejandro Medina y Rolando Castello Junior era el punto en cuestión, la presencia de Gustavo “Chizzo” Nápoli (guitarrista y cantante de
Esta versión 2010 de Aeroblus, con Chizzo cubriendo el rol de Norberto "Pappo" Napolitano, sonó muy ajustada, pese a contar con algunos problemas de sonido.
Arrancaron con tres temas de su único disco de 1977. En primer lugar, “Vamos a buscar la luz”, en una versión muy potente, a la que siguieron “Tema solísimo” y “Completamente nervioso”.
Junto a los dos integrantes originales -Medina (bajo y voz) y Castello Junior (batería)-, y además del “Chizzo”, se le sumó Claudio Rodríguez, guitarrista de
Aunque en un momento se tuvo que parar el show por la rotura del parche en uno de los bombos de la batería de Castello, estos inconvenientes no opacaron en ningún instante al concierto.
En todo momento, se lo notó a “Chizzo” muy contundente e interpretando muy bien los solos del Carpo, y además se adaptó perfectamente a la base demoledora que conforman Medina y Castello. Esta ausencia de 33 años de los escenarios parecía imaginaria.
El ex bajista de Manal aprovechó para mostrar a su grupo actual haciendo cuatro temas de su repertorio. Para ello se sumó su baterista y su mujer, Lola Medina, en coros, que también hizo lo mismo con algunos temas de Aeroblus.
Luego de este intermedio, continuaron con “Arboles difusores” y “Sofisticuatro”, que junto a los primeros tres de la lista fueron los más logrados.
Hacia el final del show, con Lola Medina en coros, el Tete de
Para cerrar la noche llegaría la frutilla del postre, que la mayoría de los presentes estaban esperando. Es decir, junto al “Chizzo”, se sumaron “Tanque” en batería y “Tete” en bajo;
Cuando se retiraban todos del escenario, Alejandro Medina quedó solo junto a su público. Ahí comentó que este homenaje era por y para “El Carpo”, para luego entonar a capela una sentida versión de “Desconfío”, de Pappo's Blues.
Quizás pueda existir alguna posibilidad de verlos nuevamente, aunque la mayoría sabía que esta reunión-homenaje de Aeroblues era un hecho único e irrepetible y que había que vivirlo como tal. Y así fue nomás.
CIRO ESTÁ LISTO PARA VOLVER
A un año del último show de Los Piojos (el 30 de mayo de 2009, en River) y tras participar en la despedida del seleccionado nacional de fútbol interpretando el himno nacional en armónica (en el mismo estadio del adiós piojoso), Andrés Ciro Martínez ya tiene todo listo para volver al ruedo: a través de su Facebook, el cantante anunció la salida del primer disco junto con su nueva banda, Ciro y Los Persas, y confirmó que la presentación oficial será en el Orfeo Superdomo de Córdoba, el 14 de agosto.
El flamante grupo está compuesto por Juan Abalos y Juan José Gaspari, en guitarras; Broder Bastos, en bajo; Lulo Isod, en batería, y Chucky de Ipola (el único ex Piojos), en teclados, y durante este año compusieron y grabaron lo que será el debut oficial de Ciro y Los Persas, que estaría en las disquerías a fines de julio. "Mi gusto es bastante ecléctico, nunca me gustó ceñirme a un estilo. De todas formas, mi base para un músico es el blues", adelantó Ciro días atrás sobre este nuevo proyecto musical.
Coincidiendo con el primer aniversario del final de Los Piojos, por estos días los fans de la banda de El Palomar coparon
¿VOLVIÓ CHARLY?
García lo hizo de nuevo: se bajó los pantalones en el Auditorio Nacional de México, frente a 6500 personas.
Que haya asumido la sobriedad como su nueva forma de vida no le quita las ganas de escandalizar a Charly García: en México volvió a hacer la histórica bajada de pantalón frente a un público que lo aplaudía enfervorizado.
“Ahora soy un chico serio”, gritó el bicolor cuando pisó el escenario del Auditorio Nacional de México ante 6500 fans. Acto seguido, se puso de espaldas y mostró la cola en el la cola ante el público que se encontraba presente y lo aplaudía en el Auditorio Nacional de México.
Pero la cosa no quedó ahí: los testigos aseguran que se enojó fiero con su propio baterista y hasta pateó el micrófono, como en las viejas épocas.
Charly se presenta en Córdoba el próximo 12 de junio, en el Orfeo Superdomo.
CRÍTICA: “ON THE ROCK” DE CALAMARO
Pablo Wilson para rock.com.ar
Tal vez, para los puristas del calamarismo -aquella filosofía inspirada en el Salmón que se ha expandido masivamente a otros países de latinoamérica en los últimos años- un álbum de Andrés no debe contener cumbia, hip hop y mucho menos introducirse con una guitarra flamenca.
Elementos que suenan tremendamente disonantes, si además añadimos el hecho de que esta nueva composición ratifica la esencia de este personaje titulándose “On The Rock”. Pero hay dos elementos que justifican la razón de ser de este bautismo: Por un lado, una voz que ya es marca registrada dentro del palo y por el otro, el hecho de que este disco es muchísimo más guitarrero que sus últimas producciones.
Entonces no importa que los primeros dieciocho segundos de el tema introductorio “El Barco”, parezcan más una canción de su invitado Diego el Cigala que una composición de “El cantante” (argento). Ya que a partir de ese punto, se comprende como artistas de géneros tan disimiles pueden contribuir a un solo sonido -situación que también se presenta con René de Calle 13 en la cortopunzante “Insoportablemente cruel”-. Enrique Bunbury participa en “Te solté la rienda”, el cover de la tradicional ranchera mexicana de Jose Alfredo Jimenez que popularizó Maná hace años. Y por si todo esto fuera poco, hay que añadir que otro de los invitados es el ídolo de la cumbia argenta Pablo Lescano, quien realiza una adaptación de “Tres Marías” protagonizado a su vez por Vicentico y su característica onda fiestera.
El Calamaro hitero y tradicional de El Palacio de las Flores y
Se trata de un álbum fresco, sin ataduras y realizado entre amigos. Quizás aquí radique la fórmula para comprenderlo mejor y no caer en pensamientos absurdos que lleven a comparar al Salmón modelo 2010 con el de tiempos pasados. Si logran atravesar el primer compacto libres de prejuicios “On The Rock” los invita a participar de la segunda parte del tour, donde Calamaro gentilmente regala a los compradores cinco nuevas versiones, un tema inédito (”Perdóname”) y el cover de “Vasos Vacíos” que realizó para el tributo a los Cadillacs editado el año pasado ¡Animense a esta parte final de la aventura, verdaderamente vale la pena!
DIVIDIDOS EN EL LUNA PARK: SOBRIOS Y A LAS PIÑAS
Mollo, Arnedo y Ciavarella presentaron Amapola del 66 en el Palacio de los Deportes porteño. Crónica y fotos.
Por Sebastián Feijoo Para Revista RS
Ochoa: "Buenas noches, gracias por estar acá después de ochoa. No pasó nada, ahí vamos", dijo Ricardo Mollo a modo de introducción. Ya había sonado la metafísica e indeleble versión de "El arriero" y el power dúo de Mollo y Diego Arnedo + Catriel Ciavarella (batería) iniciaban el recorrido por Amapola del 66, que tendría paradas en todas las estaciones del disco. Sí, habían pasado ocho años desde Vengo del placard de otro (2002). Demasiado tiempo. Tanto como para que Divididos no hubiera tenido disco nuevo en toda la era de los mega festivales.
Amapola del 2010: Si por un lado los fans estaban ansiosos por un nuevo disco de Divididos, también quedó claro que la banda tenía todas las ganas de tocarlo. De las más roqueras a las más telúricas, pasando por las más cancioneras: "Hombre en U", "Buscando un ángel", "Mantecoso", "Muerto a laburar", "Amapola del 66", "La flor azul", "Senderos", "Jujuy", "Caminando", "Boyar nocturno", "Avanzando retroceden", "Perro Funk" y "Todos", fueron pasando de a una, sin apuros. El público de un Luna a tope cantó varias, se sacudió con otras, se conmovió en más de un caso y siempre se mostró dispuesto a escuchar. Sonaron todas casi perfectas y con el plus del vivo. Es casi redundante, pero pocas bandas suenan tan sólidas y vitales en un escenario como Divididos. "Gracias por fumarse todo el disco", diría sobre el final el propio Mollo.
Intensidad y belleza, no tan al palo: Siempre con una excelente puesta de luces con incluyó una pantalla detrás del escenario que tiraba imágenes para enmarcaban visualmente las canciones y una reproducción en movimiento del molino de la tapa del disco, la banda le dio un gran segmento del show a canciones que se acercaban a las diferentes geografías del país y se desentendían del alto voltaje. "Vientito del Tucumán", "Par Mil", "Avanzando retroceden", "
Con un ejército de mis amigos: Peteco Carabajal (violín), Sandra Farias (danza y bombos), Nazareno Saavedra (bombos), Gustavo Valeriano (guitarra), Facundo Nardote (lap steel), José González (vientos), José Toconás (charango), Rubén Patagonia (voz), Micaela Chauque (voz); y Fabiana Cantilo (voz), Isabel de Sebastián (voz), Claudia Puyó (voz) y Ciro Fogliatta (teclados) -estos últimos para una versión de "With A Little Help From My Friends" (The Beatles)-, fueron los invitados de la noche. No se trató de encuentros para la foto, protocolo o sumar nombres. La clave fue la música y sobre todo hacerle justicia al cada vez más decidido y rico desembarco de Divididos en la cultura de la tierra.
Fiebre de miércoles pasada la medianoche: Después se alternarían canciones nuevas, algún regreso al norte, una visita al sur y Mollo anunció: "a partir de acá, un poco de rock & roll que no viene nada mal". Entonces se sucedieron "Sucio y Desprolijo" (Pappo's Blues), "Rasputín", "El 38", "Ala Delta", "With A Little Help From My Friends" (la versión no resultó tan atractiva como podía imaginarse), "Amapola del 66" (dedicada a Gustavo Cerati) y la yapa de "Nextweek", con zapada final y Mollo bajando del escenario y abrazándose con decenas de fans. Habían pasado tres horas de música que confirmaron que -más allá que algunos nos quedamos con ganas de más novedades en "Amapola del 66" -, Divididos sigue siendo una banda viva, en movimiento y capaz de dar shows de una seriedad y compromiso que la distinguen de la mayoría de sus pares. Ayer el trío volvió a brillar por peso específico -¡cómo cantó Mollo!-, repertorio y el cuidado con el que llevaron al escenario las canciones nuevas. Repiten hoy y el 3 de julio.
EL REGRESO DE GIT
El grupo formado por Guyot, Irurri y Toth relanzó la banda oficialmente con un mini recital transmitido por Mega 98.3
El 1 de junio de 2010 es otra fecha para marcar en el calendario del puro rock nacional. Es que volvió GIT, el grupo formado por Guyot, Irurri y Toth.
La banda ya había tocado unos temas en el último Cosquín Rock, pero en ese momento el regreso no era oficial.
Esta mañana Mega 98.3 estuvo desde temprano junto a los músicos en la estación en la que el trío abordaría el tren que lo dejaría en la terminal de Retiro.
El mini recital se realizó en un escenario armado en un andén preparado para la ocasión. El show comenzó con Viento loco, un clásico. Y entre otras de las canciones de siempre, aprovecharon para estrenar una nueva: Tu nombre, que ya suena en Mega 98.3.
Además los integrantes de GIT anunciaron que harán una gira latinoamericana y que en septiembre tocará en Buenos Aires.
JAVIER CALAMARO PRESENTA “ESTE MINUTO”
Agencia Télam
Javier Calamaro estrenará en vivo los temas que integran “Este minuto”, su nuevo disco, este miércoles en el Samsong Studio de Buenos Aires.
Javier CalamaroEn julio del año pasado, Javier y Los Piratas (banda que acompaña a Calamaro desde hace 8 años), volvieron al rock, registrando en los Estudios ION de Buenos Aires todas las canciones del nuevo álbum que está integrado por 9 canciones y un Making off de 11 minutos.
Entre los temas está el que le da título a la producción, “Este minuto”, -cantado junto a su hermano Andrés- e incluye además una versión personal de “Loco tu forma de ser” a dúo con Jorge Serrano (líder de los Auténticos Decadentes).
“Canción para Romeo”, una versión de “Sueño con Serpientes” de Silvio Rodríguez (combinada hábilmente con Spoonman, de Soundgarden); “El resto de mis días” junto a David Lebón, “Abeja Reina” (en versión de recuerdo de Los Guarros) y “El Cacike Marihuano”, son algunas de las piezas incluidas en la placa.
UN FELICÍSIMO Y SIN RETORNO ENCUENTRO DEL TANGO Y EL ROCK
Por Orlando Verna / Diario La Capital (Rosario)
A sala llena, con la garra de Adriana Varela al frasear tangos de todas las épocas y la novedad de ofrecer un dueto de voces junto a Pedro Aznar, el show “Puerto a puerto” que La Gata estrenó el sábado en El Círculo resultó en un felicísimo y sin retorno encuentro entre dos grandes vertientes de la música urbana, el tango y el rock. Además, el recital sirvió para ratificar la estrecha relación que la cantante ha trabado con su público, que alcanza su climax al final cuando el repertorio es a la carta.
El show comenzó con homenajes a Cadícamo con “Sobre el pucho”, a Gardel y Lepera con “Caminito soleado” y a Celedonio Flores con “Muchacho”, pero sobretodo a la guitarra y sus intérpretes con “Vieja viola”. Hubo lugar también para una canción del cantautor español Joaquín Sabina, “Contigo”.
Desde los orígenes. La metáfora del puerto pesa mucho en la historia y en la nueva propuesta de La Gata. Rápidamente trazó una elipsis entre su Avellaneda natal y Rosario; puso en relieve su último trabajo discográfico, “Docke”, al que definió como “orillero”; y reivindicó sus orígenes rockeros, desde los que partió para navegar, con el posterior timonazo impulsado por el Polaco Goyeneche, su carrera artística.
Y son esas mismas raíces las que le permiten desdibujar los límites de los géneros musicales, al punto de agrupar a aquellos que experimentó desde chica en una nueva y brillante música urbana. Y de la que, obviamente, forman parte estructural el tango y el rock.
Con ese handicap, Varela encaró tres obras del rock nacional y a ritmo de 2x4 las convirtió en flamantes canciones. De “Pedro y Pablo” hizo “Che ciruja”, De Alejandro del Prado interpretó “Tanguito de Almendra” y de Fito Páez, “Tumbas de la gloria”, tema con el que alcanzó un gran nivel interpretativo.
La trilogía mencionada ofreció la puerta de entrada al show de su invitado especial: el ex Serú Girán Pedro Aznar, quien se dedicó a ofrecer un ajustado contrapunto de voces, afinado a más no poder, pero demasiado medido para la expresión de sentimientos que necesitan himnos del tango como “Malevaje”, “Malena”, “Sur”, “Mano a mano”, “Muñeca brava” y “Volver”.
Para ponerle el moño a una noche de emociones explícitas, la cantante debió salir dos veces para hacer a pedido del público “La Gata Varela”, “Duelo criollo”, “Los mareados” y “Naranjo en flor”, aunque en la sala ya había quedado claro que aquello no era un recital de tangos, sino de música urbana.
CIRO FOGLIATTA
“EL ROCK ARGENTINO GOZA DE BUENA SALUD”
Autor: Reporter y rock.com.ar
Iniciador del rock en castellano con Los Gatos y un tema emblemático como fue “La balsa”, Ciro Fogliatta vuelve al ruedo con “Acordate de olvidarme”, un disco que también le sirve para hacer un balance sobre la actualidad de un movimiento del que fue nada menos que uno de sus fundadores. “El rock argentino goza de buena salud”, sentencia.
“El rock argentino actual goza de buena salud porque está avalado por años de continuidad, talento y trabajo que ya lo han consolidado”, argumentó Ciro Fogliatta, en diálogo con Reporter. Aunque el músico no mostró el mismo convencimiento al hablar de los ideales de antaño, que definió como “en suspenso”.
Es que, en los 60 y en los 70, el rock argentino auguraba ser mucho más que música, acaso por la formación de sus representantes, con una impronta entre ideológico y cultural superior años luz de la media rockera de hoy.
Pero Fogliatta no es solamente optimista en su pensamiento sino en sus ganas de seguir editando música. Así, lanza “Acordate de olvidarme”, un trabajo discográfico sobre el que habló con Reporter.
+ “La vida no vale nada en esta ciudad” dice en “Rap en la city”. ¿Le afecta tanto el tema de la inseguridad como para componer al respecto? ¿Es su forma de canalizar su preocupación?
El tema de la inseguridad no me afecta directamente. En el rap hay una descripción de la otra Argentina, no la de los chicos del face-book hablando pavadas por Internet sino aquella marginal de los barrios olvidados por la cultura y los servicios donde un menor o adolescente que cae en la delincuencia puede pensar que la vida no vale nada y está viviendo en Buenos Aires en la misma ciudad que vos. ¿Canalizar? Término muy psicoanalítico, típico de Buenos Aires. Acá no hay tiempo de canalizar, hay que ponerse a trabajar con ideas y yo las tengo pero esto sería tema para otro reportaje.
+ ¿La canción “Anonimato delirante” sería algo así como una versión actual de “Cambalache”?
Sí señor, la versión de un cambalache bien “argentino”.
+ ¿Por qué eligió particularmente hacer dos temas que no son de su autoría como “Balada para una bala”, de autoría de Dalmiro Sáenz, y “Distinto tiempo”, de Nito Mestre?
Ni loco me iba a perder un texto cariñosamente cedido por Dalmiro. Hacía dos o tres años que lo tenía guardado. Cuando se dió la oportunidad compuse un rock and roll y quedó, en mi opinión, un hit gracias a esa impronta de síntesis imaginativa de nuestro poeta y escritor Sáenz. Y el tema de Nito ya lo había grabado en el homenaje al rock argentino de Melopea con Los Gatos Salvajes. En ese entonces Juan Carlos Pueblas, el guitarra de LGS, le hizo un arreglo muy bueno que llamó la atención de Alfredito Toth.
En mi disco repetí la fórmula con pocas variantes.
+ El disco tiene un sonido que se puede emparentar con el sonido primigenio del rock nacional. ¿Es intencional, más allá de ser usted uno de sus fundadores?
Sí, el sonido de algunas canciones se puede “emparentar” con esa onda “garage” de LGS. Por ejemplo en “Balada para una bala”, “No había nada de nada”, “Distinto tiempo”, es un poco más Gatos. Igual no es el mismo de antaño y creo que hay un brillo de sonido moderno en todos los tracks. Un poco lo busqué y otro poco se fue dando así. En “Balada para una bala” hay un solo con un órgano analógico que recuerda el “Farfisa” de “La balsa”.
+ Cuando era parte del rock iniciático, ¿fantaseaba cómo sería el rock décadas después?
Cuando empezamos con todo este “subgénero” de rock argentino teníamos ilusiones como todos los jóvenes. Éramos ambiciosos en lo artístico y queríamos llegar a sonar como los grupos norteamericanos e ingleses, con ese dominio del sonido y, por supuesto, mejorar nuestros bastante pobres equipos e instrumentos. En algunos aspectos andábamos a ciegas (técnica y producción artística), pero hicimos pié y los resultados están ahí.
+ ¿Siente empatía con algún artista o grupo de los más jóvenes generacionalmente?
Sí, suelo escuchar grupos jóvenes e ir a los conciertos. Tuve la oportunidad de producir el año pasado a una banda muy buena de Avellaneda, “Fuga de Luz-tres”. Me gusta lo que hace Gori con Fantasmagoria y también una artista nueva, Alelí Cheval, que tiene muy buenas canciones.
+ ¿Cuál es su apreciación del rock argentino actual? ¿Cree que alguien lleva hoy la bandera del rock primigenio? ¿Cree que aquellos ideales están presentes o se perdieron?
El rock argentino actual goza de buena salud porque está avalado por años de continuidad, talento y trabajo que ya lo han consolidado. La bandera la llevan varios: las que vienen de Los Gatos y Almendra ahora portadas por Calamaro o Fito y los mitos definitivos como Charly y Pappo, aunque seguramente la banda abanderada es Divididos. ¿Los ideales? Hmmm… en suspenso.
ROLANDO CASTELLO JUNIOR
Fuente: lahistoriadelrock.comar
Luego de disolver Pappo’s Blues, Norberto “Pappo” Napolitano viaja a Brasil donde junto a Alejandro Medina (ex Manal y La Pesada) y el baterista brasileño Rolando Castello Junior forman el trío Aeroblus.
La banda logra editar un solo disco con un sonido bastante pesado, quizás demasiado para la época. La tardanza en la edición del disco, mas la presión que realizaba la policía en esos años hicieron que Rolando Castello Junior decidiera volver y quedarse en Brasil, Pappo y Medina intentaron seguir sumando a Darío Fernández en batería paro finalmente continúarian con Pappo’s Blues.
Siempre supimos de Aeroblues por los dichos de Medina y Pappo, pero los extraños caminos virtuales de Internet nos conectaron hace un tiempo con Rolando Castello Junior. De ese ida y vuelta virtual, surgió esta nota donde nos relata partes de la historia de Aeroblus hasta ahora desconocidas.
Los primeros contactos con el rock Argentino
La primera vez en que oí hablar de Pappo fue en el año de 1973… una amiga mía tenia un amigo argentino que tocaba la viola y tenia sus discos, de ahí a oír los discos demoró solo tiempo Mi primer disco de rock argentino me lo trajo mi hermana de Buenos Aires allá por el 1974, era el de Billy Bond y La Pesada con la canción "La maldita máquina de matar", que se torno en mi tema favorito y fue mi primer contacto con Alejandro Medina.
En el 1974, yo estaba tocando con mi primer grupo profesional de verdad y con relativo suceso, se llamaba Made in Brazil. Una tarde cuando probábamos el sonido en un teatro en São Paulo donde íbamos a tocar, apareció una mina de Rió de Janeiro, una groupie, muy buena gente y con una buena charla, ella me habló de otros grupos argentinos, así comencé a saber por ejemplo de Invisible.
“El negro” Medina...
Meses después, estando tocando en Río de Janeiro y la misma mina apareció por el recital... nos fuimos a tomar unas copas, ella me dijo que conocía a un músico argentino llamado Alejandro Medina y que El siempre iba a ese mismo bar donde estábamos, entonces le pedí que si por casualidad el veía aquella noche, me lo presentara. Por pura suerte esa misma noche lo conocí, seguí con los recitales en Río y de ahí nos fuimos a tocar en Bahía, pero no volví a ver más al negro.
Seguí con la rutina de recitales, hasta que un día estuve con Medina en São Paulo, El estaba viviendo por allá, donde lo reencontré no lo recuerdo, pero con seguridad fue en algún bar o recital.
Como él tenia mi teléfono y dirección, dé vez en cuando venía con la historia de hacer un grupo con este o con aquel músico, pero la cosa nunca se daba y yo estaba laburando bien con mi grupo, confieso que yo en ese momento veía a Alejandro con muchas ganas de hacer un grupo y me parecía que andaba en una búsqueda constante de compañeros para realizarlo.
Tiempo después me fui del grupo, me fui de Brasil y pase un tiempo en América, tocando y de paseo ademas de comprarme una nueva batería.
Aeroblus el comienzo.
De vuelta a Brasil, me encontraba en mi departamento totalmente ajeno al mundo y un poco deprimido con lo d
e estar de vuelta a la tierra de la dictadura y con la escena rockera que estaba bastante mal. Pasaba días sin salir de la casa, me quedaba oyendo los discos que había traído y viendo mi linda batería Ludwig sin uso. Un día contrariando mis pedidos de que no me llamasen por el teléfono interno del edificio (portero), el aparato sonó, creí que no era para mí y lo conteste, era Alejandro, estaba abajo y quería subir!... a regañadientes le dije que subiera.
Alejandro me dijo que estaba con Pappo en una finca y que querían hacer música, no me lo creí, pensé que estaba de joda o mintiendo. Me decía que fuéramos mañana mismo a la finca… y bueno arreglamos para ir. Al día siguiente nos fuimos, Yo por las dudas no lleve mi batería nueva, lleve la batería antigua una Gretsch, todavía no creía en la veracidad de los hechos que me contaba Alejandro.
Después de unos
Acto seguido, bajé la batería y la monté, había un Marshall de guitarra que lo usaba Medina y Pappo tenia un Fender Twin Reverb, que después supe había sido prestada por Botafogo. Nos fumamos un porro y comenzamos a tocar, luego de los primeros temas vimos que había una buena química entre nosotros y comenzamos a sonreír, (tengo hasta hoy la cinta del primer ensayo), en ese momento tocamos lo que vendrían a ser los temas de Aeroblus, muy distintos a los que mas tarde serian, tocamos temas de Pappo y Alejandro aunque yo no los conocía y la prueba final para mi, fue tocar un blues, recuerdo que a Pappo le encanto que yo tocara blues tan bien como tocaba rock, me quedé muy contento con su reconocimiento.
Luego de ese primer día íbamos seguido a la finca para tocar y ahí empezó a definirse el repertorio de Aeroblus.
Tiempo después Pappo se fue con Alejandro a São Paulo donde se quedó algunos días y luego los dos partieron para Buenos Aires. Yo debía ir después si la producción me enviaba los pasajes. Antes de la partida… Alejandro se quedo varios días seguidos repitiendo como si fuera un mantra que sentía "vibraciones Argentinas”, todo acababa en lo de las vibraciones argentinas con eso o aquello, se veía muy feliz por volver a Buenos Aires.
El día que se fueron los lleve al aeropuerto, los largue en una puerta y fui a estacionar el auto, volví a la misma puerta de entrada y veo al Twin Reverb abandonado y ni sombra de ellos… no entendí nada, se habían ido a tomar un café y lo dejado ahí, eso me pareció una locura pues alguien hubiera podido llevarse el equipo, después de alguna reprimenda de mi parte, los dos se partieron.
Me quedé en Brasil sin muchas ganas de ir a Argentina, ya que en los periódicos y en la televisión todos los días habían noticias terribles de lo que pasaba en el país con la guerrilla, ejecuciones, torturas, desaparecidos y toda suerte de mala onda. Por lo tanto yo no veía con buenos ojos mi ida a Baires, aunque en Brasil también viviéramos una dictadura, la cosa aquí era mucho mas liviana y no había problemas con que uno fuera distinto por las ropas y pelo largo.
Alejandro siempre me hablaba por teléfono y decía que todo estaba bien, pero yo iba inventando excusas para no ir. Hubo un momento en que ya no había mas excusas a no ser la de que para llevarme la batería necesitaba plata para el exceso de peso en el embarque, de pronto la producción mando la plata, me hice coraje y partí a Baires.
Ese raro personaje del avión
En el avión conocí a un tipo muy raro... no recuerdo de donde era y ese tipo no me largo en todo el viaje, al bajarmos en Ezeiza tuve una mala impresión, el aeropuerto estaba lleno de soldados armados, no tuve problemas en pasar con la batería que era gigante y con ese tipo a mi lado todo el tiempo, al llegar afuera de la aduana casi no había gente en al aeropuerto, pero ahí estaba Pappo con Dario que seria mi plomo, me dijo que Alejandro y su papá nos esperaban afuera ya que no dejaban entrar mas que dos personas para recibir a los que llegaban de viaje por motivos de seguridad.
Salimos cargados del aeropuerto y ahí estaban Alejandro y el viejo de Carpo nos esperaban en una camioneta, la cargamos y subimos y el extraño tipo del avión subió con nosotros. Nos fuimos a la Paternal, donde nos esperaba Angelita la mamá de Pappo con fideos con tuco, todos comimos incluso el tipo que era mi sombra. De pronto el tipo se borró y nunca más lo vi, hasta hoy…. no entendí nada.
Esa noche no conseguí dormir, mucha adrenalina y un territorio extraño. Al otro dia, sin dormir, fui al centro con Dario a comprar palillos, ahí descubrí el sándwich de miga, del que me quedé adicto...
Aeroblus en Argentina
Volvimos a ensayar en la casa de Pappo, pero tanto tiempo sin ensayo, hizo que prácticamente tuviéramos que empezar de cero. Poco tiempo después haríamos el recital de estreno en el teatro Premier, mucho se dijo de ese recital, el Expreso Imaginario nos recago, pero Clarin hizo muy buena crítica. No estábamos en el mejor momento del grupo pero estábamos bien, son mil historias paralelas a este evento, pero para mi fue un buen recital.
Después de eso volvimos a ensayar todos los días. Cambiamos de manager y nos fuimos a grabar en Phillips en los estudios al lado de la Policía Federal. Ya en ese momento el grupo estaba mucho más prolijo y sonaba fuerte. Grabamos el disco en un par de días.
Hicimos muchos recitales por la provincia, a veces dos en la misma noche. De cuando en cuando, me iba a Brasil un par de días y volvía. Pero aunque mi estancia en Buenos Aires fue muy buena, con el grupo que era buenísimo, con comida y vino fantásticos y las numerosas novias que tenia, había el constante bajón de la policía y la represión, fui en cana varias veces por lo del pelo y me detuvieron otras docenas de veces… simplemente imbancable.
Cierto día, de la nada… Pappo dijo que se iba a casar, como yo vivía en su casa, no me pareció que en el futuro las cosas seguirían como antes. Con lo del casamiento y con lo de que el disco que tardaba en salir, volví a Brasil por un tiempo, pero esta vez me lleve la batería. Pensaba en tocar un poco con amigos y después volver cuando el disco hubiera salido.
Algunos días después de mi vuelta, recibí una invitación para tocar en un nuevo grupo que estaba armando Arnaldo Baptista ex Mutantes, era un convite irrecusable, pero lo que mas peso en mi decisión, fue el hecho de que ya no me bancaba mas andar como en la clandestinidad, por lo del pelo y los hijos de puta de la policía siempre jodiendo y ni hablar de la constante falta de porro en Baires.
Por lo tanto ese fue el fin de Aeroblus y no las constantes idas y venidas de Pappo con Pappo's Blues como se ha escrito a veces, cuando los chicos se dieron cuenta de que yo no volvería, intentaron seguir con Gonzalo Farrugia en la batería, lo que me lleno de orgullo, por que el Pelado era mi baterista preferido en Argentina.
Al final...
Tuve mucha suerte en haber tocado con los chicos y fue sin duda uno de los puntos altos de mi carrera, amo Baires y fui muy feliz con los amigos y amigas que por ahí hice. Seguro que los bajones fueron horribles pero infelizmente no fue un privilegio solamente mío.
Hoy en día acá en Brasil hay toda una generación que ama el sonido de Aeroblus, eso ya es para mi un gran premio y victoria. Tal vez para mi, lo de Aeroblus tenga un significado mayor que el que tuvo para Pappo y Alejandro, pero cada uno tiene su carrera y sus motivos.
Tengo en mi mente innumerables películas, fotos y aventuras que pasamos juntos en esa época. Y tengo en mis archivos una linda cinta con Aeroblus en vivo y un par de temas inéditos. Quizás algún día vean la luz, con la tecnología todo es posible.
Lo mas loco después de todo lo que paso es que el debut de Arnaldo y Patrulla del Espacio, mi nuevo grupo After Aero, fué justamente en el "Concierto LatinoAmericano de Rock", tocando junta a Crucis, Nito y los Desconocidos y el fantástico León Gieco. Para mí, una continuación de Argentina y Buenos Aires
Patrulha Do Espaco
Durante 1984 Patrulha tenía intenciones de llevar a Brasil a un guitarrista argentino ¿Quién era este guitarrista?¿Es verdad que este músico falleció en un accidente de tránsito en Buenos Aires?
En verdad el guitarrista que íbamos invitar al grupo ya vivía en Brasil y se llamaba Horacio, no recuerdo su apellido, y si el murió antes de que empezáramos a trabajar en un accidente de moto.
Tuviste contacto con Pappo durante 1984? Cual era la idea en ese momento, armar un nuevo grupo o meter a Pappo en Patrulha do Espaco?
Si estuve con Pappo en Rió por ocasión del Rock in Río, luego volvimos a São Paulo, donde se quedó viviendo conmigo en mi casa y en donde ensayábamos, luego grabamos unos temas que finalmente salieron en el disco de Patrulla llamado, "Patrulla 85"
Los ensayos con Pappo como estuvieron? Que les aporto a la banda y por que decidió volver Pappo?
Los ensayos y la vida en común fueron muy buenos, nos divertíamos mucho Pappo estaba entusiasmado. El perdió un par de equipos Marshall en la aduana de Río -por una boludes de unos tipos que lo estaban manejando- antes de nuestro encuentro en Río, eso lo dejo muy mal… también se dio la oportunidad de una vuelta con Riff, por eso decidió irse. El gran aporte de Pappo al grupo, fue una sonido mas pesado y sin duda su enorme habilidad y buen gusto con la viola.
Como fue recibido el disco "Patrulha 85" en Brasil?
Muy bien, pero como por ese tiempo habíamos parado con el grupo y sin recitales para difundirlo no hubo mayor repercusión del disco, sin hablar que ya no estaba Pappo.
En 1994 te encontras de nuevo con Pappo, ¿Dónde y como fue el encuentro? Tocaron juntos de nuevo?
Pappo estuvo por entonces tocando en el "Nescafé Blues Festival", estuvimos con él todo el día en el hotel, la prueba de sonido y en el recital. El tipo que producía el festival dijo que en un tiempo más Pappo volvería a hacer un par de fechas en Brasil y que quería que nosotros tocáramos con el, así un tiempo después volvió y hicimos dos recitales juntos, tocando básicamente blues. Hicimos solamente jam en los recitales y fue muy divertido fueron solamente unos días de joda y música entre amigos.
FITO PAEZ Y LAS SENSACIONES TRAS UNA SEMANA HISTORICA
“Aparecieron claramente dos países, el virtual y el real”
Por Karina Micheletto para pagina/12
Su concierto de cierre de los festejos por el Bicentenario dejó imágenes inolvidables, que se encadenan con ese Confiá que propone su último disco. Fito se anima a lecturas artísticas y políticas, sin temor a que lo miren torcido.
Dice que no bajó. Que las fotos todavía flotan, reales. Que, cuando le tocó, trató de estar a la altura de lo que estaba viviendo. Hace unos días protagonizó un momento que pasará a la historia: actuó frente a la multitud más grande que se haya reunido en el país. Dos millones de personas, de fiesta hasta las dos de la mañana, coreando, bailando, saltando, celebrando sus canciones. Fito Páez dice que se siente un privilegiado. Y hace su lectura, sin medias tintas: “Lo que pasó fue tan fuerte que es
inapelable”. “Aparecieron muy claramente los dos países, el virtual y el real. El que se intenta tirar desde la pantalla, desde diversos grupos de interés, el de la ‘crispación’, no parece muy real frente a esto que pasó”, interpreta. “Por eso la gente cumplió un papel protagónico fundamental. Vino a decir ‘muchachos, bájense un poquito del carro, que estamos acá’. Fue inesperado para todos.”
Fito tiene un nuevo disco, desde cuyo título dice y se dice: Confiá. No es en respuestas promocionales donde parece estar enfocada su energía. Le interesa, en cambio, hablar largamente del sentido de esa canción, de esa palabra, de cómo inesperadamente conecta con lo que acaba de vivir. En el living de su departamento parecen haber sólo dos cosas fijas, colocadas con amoroso esmero: al fondo, el piano, el estudio casero en el que cuenta que pasa varias horas diarias de trabajo. En la pared principal, los cuadros de su hijo Martín, de 11 años, que estallan en colores. Vuelven, su hijo, su hija, una y otra vez, en la charla con Página/12. Porque están en su vida, explica. “Y porque son los que hacen que esto se ponga cada vez mejor.”
–“La gente en la calle, qué hermosa.” La crónica de este diario rescató esa frase suya en el recital de la 9 de Julio: fue muy conmovedora la manera en que la dijo. ¿Qué se le pasó en ese momento por la cabeza?
–¡¡Uff!! Muy fuerte, sí. A mí también me llamó la atención cuando lo vi, después. Pensé: ¿qué fue esa frase allí? Y claro, era el recuerdo de la adolescencia, lo que era no poder estar en la calle hasta el ’83. Se te vienen cosas de la historia, la de todos. Uno no sabe por qué hace las cosas en una situación como ésa, es tan border que no tenés mucho control sobre lo que sucede. Pero aparecen estas cosas que son profundas. Era muy potente ver esa cantidad de gente disfrutando, un poco a la manera brasileña. Era estar en la calle siendo dueño de la calle. Eso fue lo que más me emocionó: la libertad. Es una palabra grande, pero es inevitable ir a buscarla cuando uno ha atravesado tantas coyunturas políticas y sociales. Cuando ves esa alegría, esa multitud con buena leche, sin un solo hecho de violencia... Eso no se puede explicar, está arriba de todos nosotros. Y ser parte de eso, ser el chamán de ese gran momento, fue un gran privilegio, un hecho muy conmocionante. La sensación era: ¡Qué lindo, qué bueno! ¡Se puede estar relajado y gozándola!
–No sólo lo sorprendió la cantidad de gente, sino la manera en que la gente estaba.
–Seguro, y muchas cosas me aparecieron pensando en eso. Primero, creo que la coyuntura política es algo. Esto no se podría haber dado en otra coyuntura, eso es innegable. Hay algo allí, de cómo están funcionando las cosas, que lo habilitó. Por otro lado también se comprueba que la idea de la crispación está pichicateada por los medios, es una idea que en la realidad no se comprueba.
–¿Cuál es entonces el sentido político y social que le da a la movilización de mayo?
–Para mí fue una clase de civilidad. Un gran grupo de gente le dijo a la clase política y empresarial: ‘Muchachos, estén a la altura de las circunstancias, miren que acá tenemos ganas de que funcione bien’. Ese es el trazo grueso que puedo sacar de estos días, fue una gran puesta en escena espontánea. Podemos hacer otras lecturas de lo que fue la puesta en escena de la 9 de Julio, y la puesta en escena de la inauguración del Colón, con todo ese tilinguerío. Ese contraste hacía todo muy obvio, casi burdo. Estaba todo contado ahí. Hubo otra puesta en escena de Macri con los agravios a Cristina Kirchner. No se puede hacer eso con alguien con investidura presidencial. En ese sentido, se ve también la vulgaridad de ese discurso.
–Lo van a acusar de kirchnerista.
–No, soy un ciudadano que hoy no encuentra dónde participar políticamente, pero que no por eso deja de ver cosas que para mí son claras, aunque la pantalla me diga otra cosa. Para mí este gobierno, por primera vez de una manera tan clara en los últimos 30, 40 años, evita que el reparto vaya sólo para las cien familias a las que les tocó siempre la torta. Y eso genera una gran conmoción, aparecen los conflictos, obvio, se está poniendo en duda un sistema. ¡Cómo quieren que haya ‘conciliación’, como piden en la tele, cuando los intereses son opuestos! En fin, hago estas lecturas con la mejor buena leche, pero sin venir a dar clases de nada a nadie, no es lo mío. Yo me dedico a escribir y a hacer música.
–Pero será consciente de que está ocupando un rol haciendo estas lecturas, siendo un artista popular.
–Como no tengo una mirada mesiánica de mí mismo, me siento parte del grupo. Opino, nada más: ‘Che, para mí esto es así, si la reparten entre más, se agradece, ¿eh?’. Entiendo que la política es el gran teatro, pero mi labor es intentar mirar el hueso de las cosas del corazón, y en la música intentar conocer el lenguaje y expresarme con eso. A veces eso le toca a mucha gente, a veces no. Y lo que pido, como ciudadano, es que el rigor que uno tiene en lo que hace lo tenga la dirigencia. Esos seis millones de personas congregadas en estos días indicaron que hay deseos de que las cosas funcionen bien. Lo que les estamos diciendo con esto es: “¡Muchachos, vamos, eh! ¡Déjense de joder!”.
Confiá
Fito Páez sigue hablando de “aquel Bicentenario”, y no sólo de su show de cierre. Del que compartió con Litto Nebbia, León Gieco y otros colegas en el homenaje al rock argentino, de las recorridas que hizo, de la vuelta de Salgán. Y de la música, claro, del oficio y del misterio de hacerla. De cómo jura que no sabe quién escribió “Yo vengo a ofrecer mi corazón” a los 22 años. De por qué “Tumbas de la gloria” es una canción tan buena que no parece hecha por él: “Lo digo siempre en los conciertos, como una excusa para explicar los elementos que encontré ahí adentro”, dice. “Las bajadas de Piazzolla, la melodía de ‘Vete de mí’, o los acordes de McCartney, o Charly, que también me ayudaron a crear todo eso. Después de tantos años, descubro que allí estaban inconscientemente todas las cosas que me hicieron.” Otro descubrimiento que apareció con los años: “Siempre me pareció que la rima, las palabras, en un sentido me ataban en lugar de liberarme”, suelta.
–Está el chiste sobre sus canciones, que hay una sílaba que siempre sobra en la melodía...
(Risas) –¡Las fuerzo, sí! Y lo sigo haciendo, en este disco también. Pero es un tema, hay algo en la rima que personalmente me aburre. Me agota pronto.
–Qué problema para encontrar el estribillo.
–¿Sí, no? Justo me metí con un género que tiene convenciones muy claras. Hace muchos años que no trabajo con estribillos, no porque no me gusten, “11 y
Y entonces aparece Confiá, el último disco de Fito, y también la canción que lo abre.
–El espíritu de su disco conecta con esto que pasó. ¿Qué piensa de eso?
–Que las cosas son extrañas, misteriosas. Esa canción, por ejemplo: la música la hice hace diez años, hice unas veinte, treinta letras, que nunca me gustaban. Hasta que apareció “confiá”, que es la última palabra. Era la palabra clave que me faltaba, en esa chorrada de texto y melódica. Cuando me fui a grabar a La Cumbre fui sin nada. Dije: va a aparecer algo. En esa idea, “va a aparecer algo”, estaba inscripta la idea del título. Vamos a confiar en que las cosas funcionen. Se había tratado de un grupo de gente yendo a un lugar a jugar, y a confiar en lo que íbamos a hacer. Fue la primera vez que hago un álbum así, que no me pregunto tantas cosas, que soluciono los conflictos en el momento. Después aparecieron otras ideas sobre esa palabra, gente que me decía: qué bueno, es una palabra que encierra buena leche. Y después, lo que pasó hace unos días, y esa palabra... Se ve que había algo allí que había que poner en escena.
–Sus hijos parecen muy presentes en el disco, aun sin ser nombrados. ¿Es así?
–Seguro que sí. Los chicos están en mi vida, y mi vida con ellos debe haber sido una de las claves que me animaron a decir: ‘Vamos todos a una casa a grabar, dale, vamos con lo que tenemos’. Esa es la clave que tiran los hijos: que todos los días se aprende algo nuevo, que la vida se está haciendo en ese momento, de eso se trata. Los pibes te enseñan la piedra, el hueso, lo indispensable. Después, bueno, si la Rolling Stone no te nombra en lo que pasó en los últimos diez años... ¡qué le vamos a hacer!
–Su trabajo puede ser visto como poco compatible con la tarea de padre. ¿Es así?
–Para nada. Yo grabo acá en casa, mis hijos están conmigo casi todo el tiempo, lo comparten. También vienen a grabar: Para hacer Confiá nos fuimos todos a Córdoba con los chicos. Después completamos el trabajo en Trancoso, y Martín vino conmigo. ¡Ayudaba con los cables, micrófonos, por eso figura en el disco como asistente! Mis hijos saben cuando me quedo con mis amigos a la noche, conocen lo que es la vida, y tienen esa vida conmigo. Eso es fundamental para poder escribir, no pensar desde la carrera, que son siempre cosas tan mezquinas y cortitas. ¡La cantidad de veces que he escuchado ‘éste está terminado, éste se acabó’!
–¿Y qué le provocan las malas críticas, lo enojan?
–Cuando era más pibe me enojaba. Ahora ya sé cómo es: estás allí con el material y decís: uy, no, no. Pero igual hay que hacerlo, hay que vivir, salir a la calle. Y en un momento aparece aquello. Lo que dice la canción: vas escribiendo el libro, todos los días. De eso se trata.
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